Hace ya casi 25 años de la desintegración de la Unión Soviética, pero en su vastísimo territorio perviven edificios y símbolos que recuerdan aquella época. La estrella roja, uno de los símbolos de la URSS, todavía se puede ver por doquier, aunque algunos pretenden cambiarla.

Es lo que ha ocurrido en la ciudad de Voronezh, al oeste de Rusia. En uno de sus edificios públicos, construido en la II Guerra Mundial como arsenal, unos desconocidos han modificado la estrella roja que corona la torre de la edificación y la han convertido en Patricio, el inseparable amigo del personaje de animación Bob Esponja.

Según la prensa local, las autoridades buscan a los autores de la fechoría, que podrían enfrentarse a 15 días de prisión. Además, informan de que los trabajos de restauración de la estrella pueden alcanzar los 1.150 euros. Queda por saber cómo lograron llevar a cabo ese homenaje a la entrañable estrella de mar de la popular serie de dibujos.