El portavoz de la plataforma de afectados por la hepatitis C, Quique Costas, ha valorado este miércoles que el ritmo de dispensación de los tratamientos a los pacientes más graves está siendo "correcto", de modo que ha pedido que, una vez se cubra lo más perentorio, los fármacos lleguen también a las enfermos que todavía están en las fases iniciales de la patología.

En rueda de prensa en el Parlamento tras reunirse con representantes de todos los grupos de la oposición, con los que ha comparecido, Costas ha incidido en que se debe "quitar esa restricción" de no atender a quienes todavía no están más graves.

"No ir hacia ahí sería una involución", ha razonado, no sin recordar que el propio exministro de Sanidad Alfonso Alonso apuntó en esa dirección hace pocos meses y tras puntualizar que el coste de los tratamientos se reduce al aumentar la solicitud de dosis y también porque ya son varios los laboratorios que los comercializan.

Al hilo de ello, y dado que las comunidades autónomas forman parte del plan nacional de abordaje de la hepatitis C, ha pedido conocer la opinión de la Xunta al respecto. "Tenemos derecho a saber qué posición defenderá nuestro gobierno", ha subrayado.

FEIJÓO, "MENTIROSO"

En paralelo a estas reclamaciones, Costas ha vuelto a poner el foco sobre la "grave situación" de los presos con hepatitis C en las cárceles gallegas y lo ha hecho para advertir de que "ninguna pena" por el delito que hayan cometido les "priva" de sus derechos sanitarios. Es por ello que ha exigido que sean atendidos y que, además, se hagan públicos los datos al respecto.

A renglón seguido, tras indicar que son más de 3.200 personas las tratadas en Galicia de hepatitis C, con una tasa de curación del 95,5 por ciento, el presidente de la plataforma ha tildado al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, de "mentiroso" por asegurar que se han invertido en este proceso unos 130 millones de euros. "Que desglose esa cifra", ha exigido, convencido de que es "falsa, absurda e imposible".

DESARROLLAR "TODO" EL PLAN

En su comparecencia ante los medios, Quique Costas también ha avanzado otras de las que serán las principales reivindicaciones de la plataforma y que pasan por que el plan nacional contra la hepatitis C se desarrolle por completo.

Así, ha requerido que la Xunta ponga en marcha las campañas de información y prevención que marca ese documento, pues se trata de una enfermedad que podría afectar a unos 55.000 gallegos, el dos por ciento de la población. Además, como ha señalado, el 70 por ciento de los infectados no conocen su estado, de modo que unas 35.000 personas pueden ser "potenciales infectadoras".

De igual modo, mientras no concluya el plan de cribado que está elaborando el hospital Carlos III de Madrid con el objetivo de erradicar la hepatitis C en el horizonte de 2030, ha urgido que se dé formación especializada a los profesionales de Atención Primaria y que se informe a la población sobre qué colectivos están en riesgo, para que se pueda atajar la enfermedad.

En este punto, ha precisado que se trata de las personas nacidas entre 1950 y 1980, cuando no se utilizaba material desechable para las inyecciones; las personas con tatuajes y 'piercings'; aquellos que hayan mantenido relaciones sexuales con sangrado sin protección profiláctica; y quienes hayan vivido en lugares con una alta prevalencia de la enfermedad (África occidental, sureste asiático...).

"Que la Consellería de Sanidade asuma su rol", ha exigido Quique Costas, para enfatizar que Galicia tiene "competencias plenas" en el ámbito sanitario y, por tanto, forma parte de su "responsabilidad" dar "respuesta" a los problemas de los afectados.

LENTITUD DEL PROCESO JUDICIAL

Finalmente, preguntado acerca de la causa abierta en un juzgado de Santiago, donde se investiga si dos cargos del Sergas cometieron prevaricación al negar a algunos enfermos el tratamiento para combatir la hepatitis C, Quique Costas ha admitido que el "ritmo" de ese proceso "exaspera".

"Las familias de ocho víctimas mortales no pueden estar contemplando tranquilamente, sentadas en una butaca, la poca actuación que está habiendo", ha manifestado, para relatar mes a mes los pasos que se han dado desde el juzgado número tres de la capital gallega. "Una cada dos meses y medio", ha concluido.