Éstos sufren, día a día, el enfado de los pacientes que forman las colas en los centros de atención primaria. Las esperas para pedir cita y el tiempo que se destina a recuperar los historiales de muchos enfermos no son las únicas consecuencias del sistema informático Diraya. Así lo afirma la junta de personal del Distrito Sanitario de Málaga, donde se reúnen los representantes de los trabajadores de todos los centros de salud de la capital, Rincón de la Victoria y otros cuatro municipios.
Esta junta de personal presentó ayer una denuncia ante la Fiscalía por los perjuicios que genera Diraya. Dicen que esta aplicación informática aumenta la carga de trabajo en los centros de salud e incluso podría facilitar errores médicos totalmente ajenos a la voluntad del profesional. Además, señalan que Diraya podría vulnerar la intimidad de los pacientes al registrar sus historias clínicas. Ésta es la tercera demanda que interpone un colectivo de trabajadores.
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