Se trata, apuntan desde el espacio cultural, de "un proceso de transformación que dura cuatro días en los que el punto de partida será diferente". Es, por tanto, un "experimento coreoescultórico que supone, además, un estreno absoluto" dentro del programa Residentes 2016. La dirección está a cargo de Tatiana Clavel, Raúl Leon y Santi de la Fuente.

'Fer-se un lloc' reúne muchas de las herramientas con las que la compañía ha trabajado a lo largo de su trayectoria. Partiendo de la idea de muros, fronteras y lugares de encuentro, La Coja se arriesga a trabajar con un material sólido pero moldeable que nunca vuelve a su volumen original. De esta manera, cada día acogerá acciones diferentes sobre dicho volumen, que sufrirá un proceso de transformación al igual que los intérpretes que lo moldean.

Desde la muralla china a la piel que nos cubre, desde las alambradas que se colocan para impedir el paso de personas hasta los silencios que a veces nos separan, La Coja Dansa busca hacerse un hueco (fer-se un lloc) en su espacio circundante, retando ciertas ideas sobre los límites, activando para conquistar lugares vetados, lugares compartidos, pequeños lugares.

En esta ocasión, la compañía "va un paso más allá en la construcción de sus piezas y se atreve con un ritmo más performativo, con unas tareas menos coreográficas y con una interpretación que pretende distanciarse de la habitual en los espectáculos de danza".