En un comunicado, el Ayuntamiento ha manifestado que "ante el cariz violento que han tomado los acontecimientos y dadas las denuncias recibidas por un supuesto exceso de fuerza en la actuación, el Ayuntamiento de Pamplona, a través del área de Seguridad Ciudadana y Convivencia, se ha comprometido a realizar una revisión en profundidad, incluyendo análisis y evaluación, del operativo".

El consistorio ha mostrado, además, su "preocupación" por los hechos sucedidos este sábado "al tiempo que quiere renovar su compromiso firme por trabajar por la pacífica convivencia entre los ciudadanos".

En el transcurso de esta actuación de desalojo, se produjeron altercados y enfrentamientos entre los agentes actuantes y algunas de las personas congregadas en las inmediaciones del inmueble. Como resultado de estos altercados se produjeron varios heridos, entre ellos 9 agentes de la Policía Municipal, que precisaron de atención médica, según el Ayuntamiento.

La actuación se saldó con el desalojo del inmueble y la detención de tres personas. La actuación vino precedida por dos hechos: la denuncia ante Policía Municipal de la ocupación ilegal por parte del propietario del inmueble y la llamada del juez de guardia, el titular del juzgado de instrucción número 2 de la Audiencia de Pamplona.