La alerta la dio la hermana mayor de la niña, que avisó a la madre de ambas de que había descubierto diferentes instantáneas sin ropa de la menor y que habían sido compartidas a través de una red social y una aplicación de mensajería rápida. La denuncia se tramitó el pasado mes de mayo, ante el temor de que la niña pudiera ser víctima de un ciberacosador.
La Policía ha investigado a siete personas, cuatro de ellas mayores de edad y residentes en Valencia, Coruña, Castellón y Cartagena, y otros tres menores con residencia en Barcelona, Bilbao y Guadalajara.
Después de entrevistarse con la menor y analizar el contenido de su teléfono móvil de forma exhaustiva, los investigadores concretaron que, aunque las imágenes inicialmente habían sido difundidas por la menor de forma voluntaria, posteriormente varios usuarios la habían embaucado, aprovechándose de su corta edad, para exigirle que mandara más de alto contenido sexual.
De esta forma la víctima se vio envuelta en una espiral de la que fue incapaz de escapar, según ha explicado la Policía.
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