Según argumenta el magistrado en el auto, fechado el 25 de julio, aunque está "plenamente acreditada" por la prueba de ADN la identidad de la madre del feto, de unas 20-22 semanas de gestación, sin embargo no hay indicios que permitan suponer que ella hubiera provocado voluntariamente el aborto.
Además, continúa el juez, existen "serias dudas" de que la mujer supiera de su propio embarazo y de la expulsión del feto; posibilidad que la ginecóloga consultada en el proceso ha considerado como "perfectamente posible" a pesar del grado de evolución de la gestación.
Por todo ello, el magistrado considera que no resulta "debidamente justificada" la perpetración del delito de aborto por el que se inició la causa y decreta el sobreseimiento provisional de las actuaciones y el archivo de la causa al no existir diligencias pendientes de practicar.
El feto de un bebé de 20 semanas de gestación apareció el 3 de diciembre de 2015 en la red de alcantarillado de Treto. Fue encontrado por operarios de una empresa privada en el alcantarillado de una finca particular que acoge una urbanización de viviendas.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios