Así lo ha explicado Sánchez Cabrera en una rueda de prensa celebrada ayer en el centro hospitalario para analizar la situación.

El Servicio Extremeño de Salud (SES) informó esta ayer por la mañana de la retirada de los lotes de contraste intravenoso utilizados para pruebas diagnósticas de TAC como medida cautelar ante el fallecimiento de uno de los cuatro pacientes que la pasada semana fue sometido a dichas pruebas en el Hospital de Mérida.

Según la Junta de Extremadura, el pasado 18 de septiembre se realizaron en el Hospital unas pruebas diagnósticas de TAC programado con contraste intravenoso a cuatro pacientes consecutivamente, "pruebas que provocaron fiebre, síntomas gastrointestinales y alteraciones renales y hepáticas que aconsejaron su posterior ingreso médico al día siguiente".

Esta tarde, el gerente del Área de Salud señaló que ese día se efectuaron "nueve TAC con contraste, de los que sólo cuatro presentaron sintomatología clínica".

"Con la investigación epidemiológica y de vigilancia de los productos sanitarios y del funcionamiento interno del Hospital que estamos haciendo, y con los resultados que nos dé la autopsia, creemos que llegaremos a un esclarecimiento de los hechos", agregó Sánchez Cabrera.

No se desecha ninguna hipótesis 

Según explicó, "no desechamos ninguna hipótesis, lo único que hemos constatado es que hay una relación causa-efecto, parece que hay una relación con el cuadro clínico que presentaban los pacientes que habían venido a realizarse un TAC".

En tanto se conocen los resultados de los estudios, dijo el gerente del Área de Salud, cautelarmente se ha precintado y dejado de utilizar los lotes del medicamento implicado en los hechos, que han sido remitidos a los órganos correspondientes para su análisis microbiológico, de concentración y composición.

Sánchez Cabrera señaló que el pasado día 19 ingresaron tres pacientes "con cuadro clínico agudo, con pronóstico febril, vómitos y un episodio de diarrea autolimitado, con el antecedente común de haberse realizado en la mañana del día 18 un TAC con contraste yodado", unos casos a los que luego se añadió otro caso más.

Los afectados 

Los afectados eran dos mujeres de 54 y 68 años, y dos hombres de 68 y 80 años que fueron hospitalizados y de los que dos fueron dados de alta, uno sigue ingresado con evolución favorable y el otro, de 80 años y que sufría cáncer de pulmón y estaba sometido a tratamiento oncológico, murió el día 24.

Por su parte, el director médico del centro, Antonio Sanz Marca, explicó que al año se efectúan en el Hospital emeritense unos 7.000 TAC y que en el 70 por ciento se utiliza este tipo de contraste intravenoso sin que haya habido incidencias hasta la fecha.

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