El ministro francés del Interior, Bernard Cazeneuve, informó este viernes de que Francia ha expulsado del país en lo que va de mes a cuatro individuos considerados potencialmente peligrosos.

La última expulsión, de un tunecino identificado como Mohsen M'Hadi, tuvo lugar este jueves por la noche, explicó en un comunicado.

Las autoridades decidieron alejarle de Francia "por la amenaza que presentaba contra el orden público su mantenimiento en territorio francés", y una vez obtenido el visto bueno de la comisión de expulsiones se pudo poner en marcha el proceso de forma "inmediata".

Otros de los expulsados este mes, de los que ya se había informado, fueron el argelino Abdelkrim Mostefai, que según fuentes policiales citadas por medios galos presuntamente estaba implicado en redes yihadistas, y el mauritano Aly Kebe, a quien se le considera implicado en el movimiento radical.

Cazeneuve subrayó este viernes la determinación de la lucha del Ejecutivo contra el terrorismo, y avanzó que a las cuatro expulsiones de este tipo efectuadas este mes les seguirán otras.