Los agentes comenzaron a investigar en mayo de 2016 detectando un incremento de denuncias relativas a los robos con fuerza en interior de vehículos en Pamplona. En una primera fase de la investigación se procedió a la detención de una mujer y a la identificación de un varón, a los cuales se les intervino multitud de efectos provenientes de hechos delictivos, según ha informado la Policía Nacional en una nota.

En la segunda fase de la investigación y gracias a las pesquisas policiales, en el mes de agosto, los agentes precedieron a la detención de otro varón, y tras la correspondiente orden judicial, se realizaron dos registros domiciliarios, interviniendo aparatos electrónicos, un dron, y varias videoconsolas, entre otros múltiples objetos.

EL 'MODUS OPERANDI'

Según ha informado la Policía Nacional, los detenidos rompían, casi siempre por la noche, uno de los cristales pequeños de las puertas de los vehículos, sustrayendo cualquier efecto que pudiera tener un valor económico.

El valor de los efectos recuperados y devueltos a sus respectivos propietarios ascendería a varios miles de euros, a los que habría que añadir el valor de los daños causados a los perjudicados.

Además, la Policía Nacional recomienda "no dejar objetos de valor o dinero a la vista, aunque sean monedas".