El escritor Gustavo Martín Garzo ha advertido este martes en Santander que "el mundo del libro está seriamente amenazado por una crisis de lectores" y "no tanto por una crisis de creadores" porque, en su opinión, "hay muy pocos lectores que sean capaces de entregar parte de su vida a leer", una actividad para la que "uno tiene que quedarse solo, en silencio y olvidarse del mundo".

Así, considera que "sólo desde ese retiro y silencio" el lector "puede entrar en el mundo que el libro le está proponiendo", pero ha lamentado que actualmente "esto cada vez es más difícil de conseguir en un mundo lleno de estímulos", tal y como ha señalado en una rueda de prensa en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) con motivo esta tarde de su presencia en los 'Martes Literarios'.

Ganador del Premio Nacional de Narrativa 1994 y Premio Nadal 1999, entre otros galardones, ha asegurado que esta crisis la "demuestra" el hecho de que "las editoriales están cada vez más preocupadas porque se vende muy poco, porque se cierran las librerías" y porque "la gente lee muy poco".

En este sentido, considera que aunque "España ha sido un país poco lector, cada vez es más inusual encontrarse a una persona con un libro bajo el brazo que se sienta a leer", por ejemplo, en un banco. De hecho, se ha preguntado "quién dedica cuatro o cinco horas a leer un libro". "El libro está esperando alguien que se entregue", ha apostillado.

Asimismo, ha incidido en que "el libro es un sueño que pide que el lector le encarne" y que "uno no puede leer un libro de cualquier manera, saltándose páginas, saltándose palabras", sino que "tiene que haber una disponibilidad". "Y para estar disponible probablemente hay que dejar muchas cosas fuera y, de esa manera, podremos disfrutar y entender plenamente" la lectura, ha explicado.

Preguntado sobre la difusión que está teniendo en la actualidad la denominada realidad virtual y aplicaciones móviles como 'Pokémon Go', el escritor ha lamentado que ver a adultos jugando a esta aplicación le produce "una pequeña inquietud", preguntándose "qué sociedad infantilizada" se ha creado.

"La literatura y la poesía tienen mucho que ver con la capacidad de estar atentos a lo que hay alrededor", sostiene, al tiempo que ha añadido que esta capacidad "se pierde con los 'smartphones' o teléfonos inteligentes, que hacen que las personas estén atentos a los móviles "en lugar de mirar los árboles o el mar".

Por otro lado, el escritor ha anunciado que a comienzos del año 2017 publicará una nueva novela, titulada 'No hay amor en la muerte', acerca de la historia bíblica de Abraham y su hijo Isaac cuando Yaveh ordenó a Abraham sacrificar a su primogénito.

A su juicio, "faltaba contar la historia" desde la visión de Isaac porque, ha añadido, desde el momento en que su padre obedece la orden de matarle "su relación no podía ser la misma, es una historia terrible".

"REIVINDICACIÓN DEL ALMA Y LA MEMORIA"

Martín Garzo también ha reivindicado que la literatura es "una reivindicación del alma y la memoria", un "diálogo con los muertos" porque, tal y como ha ejemplificado, si se lee a Gabriel García, a Miguel de Cervantes o a William Shakespeare, "se escucha su voz", al tiempo que ha asegurado que "los muertos también tienen cosas que contarnos", como ocurre con obras como 'Pedro Páramo', de Juan Rulfo.

También ha explicado que, en su opinión, "el alma es la memoria y al perder la memoria, una persona se vacía por completo, se pierde la humanidad de alguna forma y hasta el lenguaje", como les ocurre, tal y como ha señalado, a los enfermos de Alzheimer.

Del mismo modo, Martín Garzo sostiene que "la literatura tiene que ver con lo oculto, con el misterio, con el secreto, con abrir las puertas cerradas" y que, por lo tanto, el objetivo de la literatura es "entrar en todo lo que permanece mudo en cada uno de nosotros y está deseando despertar".

En este sentido, ha apuntado que "si algo nos lleva a preguntarnos lo que es, eso es literatura" y, sobre el contexto literario actual, ha afirmado que "un porcentaje muy elevado" de los llamados 'best-sellers' "no se pueden llamar en rigor literatura, son que son libros de entretenimiento".

No obstante, ha aclarado que esta calificación "no quiere decir que no pueden ser buena literatura" porque, tal y como ha continuado, "los hay literariamente ricos y complejos". Sin embargo, sí ha defendido que "un buen libro debe golpearnos, cuestionarnos, llevarnos a territorios desconocidos de los demás y de nosotros mismos".

"LA FANTASÍA NOS PERMITE AHONDAR EN LO REAL"

En esta rueda de prensa, además de reivindicarse como "un firme defensor de la fantasía" no sólo para niños, sino también para los adultos -"pobre del adulto que le dé la espalda a ese mundo", ha asegurado-, Martín Garzo ha afirmado que "seguro" que volverá a este género literario y ha explicado que en los cuentos de hadas y maravillosos "se ha guardado la memoria de los relatos que el hombre ha necesitado contarse desde el inicio de los tiempos".

Del mismo modo, ha reivindicado que "la fantasía es una facultad que nos permite ahondar en lo real, que no es sólo lo que está aquí, también hay una parte oculta", en referencia a "los deseos, los secretos, lo que no acertamos, lo que no debemos o lo que no podemos decir".

Por otra parte, considera que "un patio de vecindad contiene el mundo entero", por lo que, a su juicio, "si fuésemos capaces de escuchar lo que cuentan los vecinos y las vecinas, los conflictos, los problemas, los momentos de felicidad, eso resume el mundo". De hecho, ha afirmado que "esto lo han sabido grandes escritores", que "partiendo de lo más local", han creado "obras maravillosas", como el mencionado Juan Rulfo.