Un vigilante de seguridad fue encontrado muerto ayer por la mañana en una gasolinera de Cártama. El establecimiento fue asaltado por dos hombres, aunque distintas fuentes del caso no se ponen de acuerdo sobre si el fallecimiento es también obra de los ladrones, según publican hoy Sur y Málaga hoy.

El establecimiento está situado en el km 50 de la autovía A-357. El hombre tenía 66 años y era vecino de la localidad. Llevaba siete meses trabajando en la gasolinera. El cadáver presentaba un pequeño golpe en la ceja y tenía una manta sobre la cabeza y otra liada con un cable a la altura del pecho -el propietario del negocio afirma que ése era el mecanismo que utilizaba el fallecido para no destaparse por las noches-.

El guarda custodiaba la estación de servicio por las noches y fue encontrado sin vida cuando los primeros empleados llegaron a la mañana siguiente. La muerte podría haberse producido, entre otras hipótesis, por asfixia o por un infarto causado por la impresión de encontrarse con los ladrones.

Sobre el asalto, las cámaras de seguridad del recinto grabaron como dos hombres accedieron al bar de la gasolinera forzando una ventana. La Guardia Civil investiga las grabaciones y el caso. Los ladrones sustrajeron un botín de unos 2.500 euros de una máquina tragaperras, pero no tocaron la caja registradora.