El robo fue perpetrado en la madrugada del pasado día 19 de julio cuando el autor, tras fracturar la vidriera de la cúpula central, se dejó caer desde una altura de más de tres metros, logrando acceder al interior del local donde sustrajo unos 1.000 euros en efectivo y ocasionó bastantes destrozos en diversas estancias de la iglesia.
Días anteriores se habían producido otros tres robos en la localidad, dos en un mismo establecimiento comercial y otro en una vivienda próxima a dicho local. Estos hechos estaban siendo investigados por los agentes y, presumiblemente, habían sido cometidos por la misma persona.
Esta investigación dio resultado pocas horas más tarde del último robo con la detención de un hombre, de 41 años, vecino de la localidad, que cuenta con numerosos antecedentes por robos con fuerza en las cosas, como presunto autor de los cuatro robos, según han informado desde la Guardia Civil.
El detenido fue puesto a disposición de la autoridad judicial que decretó su ingreso en prisión. Las actuaciones han sido llevadas a cabo por componentes del Área de Investigación del Puesto Principal de Mijas de la Guardia Civil de Málaga.
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