El desempleo en España vuelve a caer un mes más, ayudado en esta ocasión por el comienzo de la campaña de verano. Las oficinas del antiguo Inem registraron en junio 124.349 desempleados menos que el mes anterior, según los datos publicados este lunes por el Ministerio de Empleo. De este modo, el número total de desempleados en España se queda en 3.767.054 personas, su menor nivel desde septiembre de 2009.

La caída (-3,2%) es especialmente acusada si se compara con la rebaja en el número de desempleados de los dos meses de junio anteriores, en los que bajó en 122.684 (2014) y 94.727 personas (2015), respectivamente. El recorte en este mes, por lo tanto, es el mayor en estos tres años de recuperación económica y el segundo más alto de toda la serie histórica, solo superado por la caída en junio de 2013 (-127.000).

"Son datos muy positivos, un acicate que nos debe animar de cara al futuro", ha dicho el presidente en funciones Mariano Rajoy tras conocerse los datos. "Para mantener estos datos hace falta emprendimiento y un marco administrativo estable, un Gobierno, a la mayor celeridad posible. España no puede permitirse que se repitan las elecciones, sería un desastre", añadió desde la fábrica cervecera de Mahou, en Alovera (Guadalajara).

Los datos de afiliación media también son positivos. La Seguridad Social ganó el pasado mes 98.432 cotizantes y el número de afiliados en el país queda en 17.760.721 personas, la cifra de ocupación más alta desde julio de 2010.

El incremento es mayor al registrado en los dos 'junios' anteriores —en 2014 fue de 56.622 afiliados y en 2015 de 35.085— y el mayor aporte se produjo en la hostelería, con 38.337 afiliados más (+3,16%), algo normal en el comienzo del verano para atender la llegada de turistas a nuestro país. De hecho, los dos mayores aumentos se han dado en dos de las principales regiones turísticas del país: Cataluña (32.688) y Baleares (26.897).

También destaca el crecimiento de la afiliación en el comercio (+27.936, 1,24%) y en las actividades administrativas (+18.587 , 1,59%), mientras que la ocupación en la Educación, debido al fin del curso escolar, cae en -51.468 personas. "Esto confirma los altos niveles de interinidad que sufren los trabajadores de nuestro sector", ha lamentado el sindicatos de funcionarios CSI-F.

"El empleo estacional contribuye a mejorar los datos de junio, pero es empleo precario y temporal, fundamentalmente en el sector servicios, por la temporada estival y por el inicio de la operación asfalto", lamenta Mari Carmen Barrera. "El empleo que se crea es pan para hoy y hambre para mañana, no va a contribuir a generar más ingresos para la Seguridad Social, que ya es deficitaria".

Este aumento de ocupación tiene un reflejo en el registro de contratos: en junio se registraron 1.920.340 en las oficinas de empleo, lo que supone una cifra récord en toda la serie histórica. Apenas 148.395 de estos contratos fueron indefinidos (el 7,7% del total), sin duda influido por las características de temporalidad de los empleos veraniegos.

La contratación indefinida sube un 17% más que el año pasado, aunque el sindicato UGT apunta a que el contrato para emprendedores —un contrato fijo que tiene un periodo de indemnización gratuita de un año— se está consolidando: "Aumenta hasta 15.709 contratos, un crecimiento del 34% respecto a junio de 2015, extendiéndose la precariedad entre la contratación indefinida", apuntan.

Y solo el 4,5% fueron tanto indefinidos como a tiempo completo; o lo que es lo mismo, el 95,5% de los contratos tuvieron alguna tara de estabilidad (eran temporales) o precariedad (eran de jornada y sueldo parcial)."Si se consolida el crecimiento económico alrededor de un 3% y mejora la productividad, los salarios irán recuperando su nivel con solidez", estima sin embargo Sandalio Gómez, profesor del IESE y experto en relaciones laborales.

El primer semestre del año se ha cerrado así con 9.493.808 contrataciones, un 8,18% más que los primeros seis meses del ejercicio pasado. "La reforma laboral es completa, equilibrada, legal y funciona", ha  explicado en rueda de prensa Juan Pablo Riesgo, secretario de Estado de Empleo.

"Queda aún mucho por hacer teniendo en cuenta que aún existe 3,7 millones de personas sin trabajo y muchas de ellas de larga duración", ha añadido Riesgo. Y es que precisamente el elevado número de parados de larga duración —muchos han agotado ya sus ayudas— y la caída en el número de desempleados han reducido un 8,9% el gasto en prestaciones (hasta 1.480,1 millones) y el número de beneficiarios (1.936.006 personas en mayo de 2016).

De hecho, apenas el 52,9% de los parados recibía en mayo alguna ayuda estatal, repitiendo la cifra mínima histórica que se alcanzó el mes anterior. "Es necesario revertir esto, el próximo Gobierno debe tener en cuenta recuperar la protección por desempleo", ha pedido Mari Carmen Barrera, secretaria de Políticas Sociales, Empleo y Seguridad Social de UGT.

La cuantía media bruta de la prestación contributiva, por su parte, ascendió a 802,3 euros, ochenta céntimos más que en el mismo mes del año anterior.