Las investigaciones se iniciaron tras recibir varias denuncias en las que varias personas manifestaron que durante un encuentro sexual con una mujer habían sido drogadas y dormidas después de ingerir una bebida -en ocasiones se trataba de sidra, pero en otras té- en la que se encontraba un compuesto llamado benzodiacepina para después robarles sus pertenencias. A una sola de las víctimas le llegó a sustraer joyas por un valor que superaba los 4.000 euros.
Según ha informado la Policía e un comunicado, iniciaron investigaciones para identificar y localizar a quien pudiera haber llevado a cabo estos sucesos y, tras ciertas comprobaciones, los agentes reunieron suficientes indicios para la atribución de responsabilidades en la presunta autoría de los hechos.
Tras la verificación de ciertos extremos e identificar y localizar a presuntos autores, los agentes establecieron un dispositivo para su detención, que se produjo tras esas comprobaciones.
Una vez realizado un minucioso registro en el domicilio de los presuntos autores, los agentes hallaron numerosas joyas entre las que destacan un anillo con un diamante de 0,75 kilates y un reloj marca Rolex, que pudieron ser recuperadas y, tras comprobaciones pertinentes, devueltos a sus legítimos propietarios.
En el registro hallaron también dos botes de 2,5 miligramos de un medicamento con un compuesto hipnótico que se denomina benzodiacepina y una placa falsa de la Guardia Civil.
Los detenidos fueron puestos posteriormente a disposición de la autoridad judicial.
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