La Xunta y el Gobierno han constituido este lunes el comité integrado de prevención contra incendios de Galicia (Cipig) para la campaña de alto riesgo -que va del 1 de julio al 30 de septiembre-, con el fin de "comprobar que todo está a punto" para actuar ante un verano que se prevé "caluroso".

Así lo ha destacado en declaraciones a la prensa el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, antes de comenzar esta reunión en Santiago que se convoca anualmente para coordinar las labores contra el fuego en Galicia. Esta época de alto riesgo contará con un operativo de 5.767 efectivos de la Xunta, que se reforzarán con personal del Ministerio, el Ejército y de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, hasta unas 7.000 personas. Además, habrá 360 motobombas, 30 helicópteros y aviones, mientras se volverá a contar con drones.

A preguntas de la prensa sobre las denuncias de sindicatos y agentes forestales sobre los medios y el funcionamiento del dispositivo contra el fuego, Alfonso Rueda ha defendido que "no decayó el esfuerzo respecto a otros años, porque no decayó el peligro".

"Cada año que pasa hay que mejorar la coordinación y hay que mejorar los medios y creo que este año se hizo un esfuerzo importante también en eso", ha proseguido Alfonso Rueda en su argumentación. "Tenemos todo el año para hablar de estas cosas, ahora es el momento de trabajar", ha zanjado.

En esta línea, ha reflexionado sobre que "las últimas previsiones" hablan de "un verano caluroso", si bien otros años hubo "esas previsiones" y luego "el tiempo fue el que fue". "No podemos estar dependiendo de eso, lo que tenemos que hacer es trabajar como si efectivamente fuese a ser un verano caluroso y después si no lo es, siempre tiene el contrapunto del turismo, pero, desde luego, desde el punto de vista de los fuegos no hay ninguna duda que ayuda", ha apuntado.

SOLO UN PORCENTAJE DE INCENDIOS "MUY PEQUEÑITO" SON NATURALES

Por su parte, la conselleira de Medio Rural, Ángeles Vázquez, ha remarcado que a partir del 1 de julio ya no habrá permisos para quemas, de forma que los incendios que haya serán "intencionados", porque solo

"un tanto por ciento muy pequeñito" de los fuegos son por "factores naturales".

También ha llamado la atención la conselleira de Medio Rural sobre que este 2016 ha sido el "mejor" arranque de año desde que hay estadísticas a nivel de fuegos.

Con todo, ha señalado que ha sido una primavera "muy lluviosa", lo que da lugar a una proliferación de vegetación y, "por lo tanto, hay una alta combustión en los montes".

Sobre este extremo, aboga por hacer el monte "más productivo", puesto cuando se vive de él "no arde" e, "incluso, vigilan los propios vecinos" el territorio.

OBJETIVO DE REDUCCIÓN DE SUPERFICIE ARBOLADA

Al respecto, Ángeles Vázquez ha señalado que el objetivo de este verano es "reducir" el número de incendios, pero, "sobre todo, la superficie arbolada", que supone una "dinamización económica muy importante" para Galicia.

El Gobierno gallego se ha marcado el objetivo de reducir este año más de un 8 por ciento (a 678) los fuegos de consideración en la Comunidad, según recoge el Plan de prevención e defensa contra os incendios forestais en Galicia (Pladiga).

Para este fin, habrá una colaboración "fundamental" en la Administración gallega con el Estado, "bajo un mando único que es el de la Xunta", al tiempo que recuerda que los ayuntamientos pueden firmar "por primera vez" un convenio con Medio Rural para una duración de tres años.

Además, se establece la creación y regulación de la figura de las agrupaciones de defensa contra incendios forestales. En concreto, se trata de promover las organizaciones de voluntarios y las asociaciones relacionadas con el medio rural y el medio forestal, y su implicación en la defensa contra los incendios.

Del mismo modo, está prevista la puesta en marcha de un nuevo sistema digital de comunicaciones, integrado en la red gallega de emergencias, y la puesta en funcionamiento del nuevo programa informático de gestión integral de incendios en tiempo real.

TRES AVIONES DEL MINISTERIO CON BASE EN SANTIAGO

Así, entre los medios existentes Galicia contará con el refuerzo de la Policíal, Guardia Civil y Ejército, entre los que habrá patrullas terrestres que ejercen labores disuasorias de vigilancia, además de miembros encargados de la investigación de incendios.

La Unidad Militar de Emergencias (UME) cuenta con un destacamento en la base General Morillo, en Figueirido (Pontevedra), mientras que tres de los aviones de los que dispone el Ministerio de Agricultura se trasladan al aeropuerto de Lavacolla como zona de actuación para que su despliegue sea más rápido.

En este encuentro en Santiago, también han estado, entre otros, el delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva; el director general de Protección Civil y Emergencias, Juan Antonio Díaz; el director general de Política de Defensa, el almirante Juan Francisco Martínez; el jefe en funciones de la XV Zona de la Guarda Civil, el coronel Miguel Estévez; y el teniente coronel jefe del V Batallón de Intervención de Emergencias de la UME, Juan Carlos Trujillo.