Según ha informado la Benemérita en una nota, esta actuación se enmarca en la 'Operación Wimper', iniciada después de que los agentes percibieran un aumento en la venta y distribución de tabaco de contrabando en quioscos y otros establecimientos de venta al público.

Tras realizar una vigilancia en diferentes puntos durante varios días, componentes del Área de Investigación de Lora del Río vieron un vehículo de gama alta de cuyo maletero dos personas descargaban unos bultos que resultaron ser, tras su inspección, 2.000 cajetillas de conocidas marcas carentes de los preceptivos precintos legales que, de las que, por ello, se ha incautado la Guardia Civil, que ha tramitado la correspondiente denuncia por presunta infracción administrativa.