El funcionario policial, A.C.P.C., se enfrenta a una acusación por supuesto delito contra la integridad moral en su modalidad de no grave, por el que el Ministerio Público interesa un año de cárcel e inhabilitación especial para empleo y cargo público por periodo de dos años.

Para el agente, que va a ser juzgado ante el tribunal de la Sección Tercera, solicita, asimismo, dos meses de multa a razón de seis euros al día por una presunta falta de lesiones.

Según recoge el fiscal en su escrito de calificación provisional, consultado por Europa Press, el agente, en unión de otro compañero, participó el 21 de julio de 2013 en una actuación que se saldó con la detención del denunciante y de otra persona, y derivó a su vez en un juicio rápido en el Juzgado de lo Penal número 1.

El perjudicado fue enjuiciado, junto a esa otra persona, por la presunta comisión de un delito de resistencia grave a la autoridad aunque finalmente fue absuelto ya que el juez consideró "que no constaba su intervención" en los hechos objeto de la acusación.

El Ministerio Público recoge que el policía, en el curso de la actuación que dio lugar al arresto, se "excedió" en sus atribuciones y, "sin que fuera necesario en ningún momento", se dirigió al denunciante "cuando estaba ya detenido, dándole varios golpes con la defensa reglamentaria en las piernas".

El escrito de calificación provisional precisa que, a consecuencia de esta acción, el joven sufrió "diversos hematomas" que precisaron para su sanidad una sola asistencia facultativa, tardando en curar 20 días sin impedimento para desempeñar sus funciones habituales.

Concreta, asimismo, que no consta el lugar exacto en el que se "propinaron los golpes" aunque sí matiza que todo "ocurrió con anterioridad a que le fuera tomada declaración" en la sede de la Comisaría Provincial de Almería.