Una opción por la que se decanta la Junta ante el informe municipal de inadecuación al Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del proyecto constructivo de la prolongación en superficie de la línea 2 del metro hasta el Hospital Civil. "Es un documento preceptivo, pero no vinculante", ha señalado López, agregando que el objetivo no puede ser otro que terminar la red para prestar "el mejor servicio a los ciudadanos".

López, quien sin querer centrar su atención en el aspecto económico, ha dejado caer, no obstante, las consecuencias económicas derivadas de paralizar el proyecto del tranvía al Hospital Civil, ha asegurado que en todo momento la Junta ha estado en "la búsqueda de una solución", pero, tal y como ha aclarado, "una que no empeore el servicio de transporte público". "No pretendo vencer al alcalde, Francisco de la Torre", ha aseverado, confiando en que "la sensatez se imponga" en este asunto.

Así, el titular andaluz de Fomento, quien mantiene el horizonte del verano de 2018 para que toda la red esté en servicio, ha insistido, en rueda de prensa en Málaga, en que la propuesta municipal del metrobús "empeora el servicio a los ciudadanos", y, además, "no es en absoluto viable desde el punto de vista económico".

Ante esto, ha dicho tener la mano tendida para reunirse en los próximos días con el alcalde de Málaga en un encuentro previo a la comisión mixta de seguimiento, donde, entre otros temas, se abordaría la adenda solicitada por el Ayuntamiento, que, en cualquier caso, siempre sería bajo la premisa de aceptar el ramal previsto a la zona norte de la ciudad.

También ha apuntado el consejero que su objetivo es la creación de un grupo de trabajo, integrado por todos los agentes implicados, para desarrollar un plan de intermodalidad del sistema de transporte público en Málaga, de manera que "se consiga la racionalidad y complementariedad y una movilidad sostenible".

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