El 50,9% de los contratos indefinidos de apoyo a emprendedores, creado en la reforma laboral de 2012, no llega a superar el año de duración, cifra que se eleva al 56,9% cuando las empresas no se acogen a bonificaciones. En contraste, en la contratación indefinida ordinaria, el 62% de los contratos sí superan el año de duración.

Así lo denuncia UGT haciendo uso de datos oficiales. El sindicato ha pedido en varias ocasiones la retirada de este contrato porque contribuye a la "precariedad" del mercado laboral al permitir el establecimiento de un periodo de prueba de un año sin indemnización por despido a su finalización.

Más del 15% de los contratos indefinidos actuales son de apoyo a emprendedores, un porcentaje que en 2013 era de 6,2%, por lo que su peso en la contratación se ha más que duplicado, un dato "preocupa" mucho al sindicato. Su utilización ha aumentado en un año un 38,2% y más del 96% de estos contratos no se ha acogido a incentivos fiscales.

Esto último, según la central sindical, es un síntoma de que puede estar utilizándose "de manera fraudulenta". En opinión de UGT, ”esta figura estrella de la reforma laboral de 2012 es un fraude, por más que se empeñen en decir que es un contrato indefinido".

El sindicato entiende que el periodo de prueba de los contratos fijos de apoyo a emprendedores permite utilizar esta modalidad como sustituto de un contrato temporal sin coste, siempre que la empresa no se acoja a incentivos fiscales ni bonificaciones. "Los diferentes comportamientos entre este contrato y los indefinidos ordinarios desenmascaran la naturaleza temporal de una modalidad que quiere hacerse pasar por indefinida", denuncia UGT.