Según recoge la calificación del Ministerio Público, a la que ha tenido acceso Europa Press, en la madrugada del día 19 de abril de 2004, el procesado se encontraba en su domicilio y aprovechando que la joven, que pasaba unos días junto a su novio en su casa, "se había quedado dormida en un sofá del salón, se acercó a ella y con ánimo de satisfacer sus deseos sexuales, se sentó junto a ella y comenzó a besarle en el cuello y en la boca, al tiempo que le acariciaba el pecho por debajo del sujetador".
Cuando ella se despertó y se percató que era el acusado quién la tocaba, "comenzó a llamar a su novio, al tiempo que trataba de incorporarse y bajarse la camiseta", si bien el procesado presuntamente se lo impidió, al tiempo que "la agarró con violencia de los brazos para poder continuar tocándola pese a su clara oposición".
No obstante, "cejó en su empeño una vez que entró en el salón el novio". Como consecuencia de los hechos descritos, la joven presentó cuatro erosiones a nivel de antebrazo izquierdo y una erosión en el antebrazo derecho, entre otras lesiones.
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