La primera reunión de este proceso se ha celebrado en la sede del Gobierno de Aragón. En el transcurso del encuentro, la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales del Gobierno de Aragón, María Victoria Broto, ha comentado que el objetivo es lograr "el máximo consenso posible" para que la Ley de Igualdad sea "de todos".

"Es un día muy importante porque esta ley puede suponer mucho para nuestra sociedad y para conseguir mejorar la posición de la mujer en ella", ha señalado. Ha recordado que este año se van a llevar a cabo 18 proyectos de participación sobre leyes o grandes proyectos y programas del Ejecutivo autonómico.

Por su parte, la directora gerente del Instituto Aragonés de la Mujer (IAM), Natalia Salvo, ha desgranado el contenido del borrador que se ha entregado a las personas que van a participar en el proceso, organizado entre el IAM y el programa Aragón Participa de la Dirección General de Participación, Transparencia, Cooperación y Acción Exterior.

En primer lugar, ha dicho Salvo, en el borrador se manifiesta el compromiso del Gobierno de Aragón con la igualdad efectiva entre hombres y mujeres. Para ello, se llevarán a cabo medidas que potencien la igualdad en materia de contratación y de presupuestos, se crearán unidades de igualdad y se potenciará la transversalidad en las políticas de igualdad. El borrador incluye también medidas relativas a empleo, salud, conciliación y corresponsabilidad.

La igualdad en el empleo tendrá un papel importante en la norma y por ello, ha asegurado, se incluirán iniciativas que fomenten la conciliación familiar y laboral y la corresponsabilidad. Asimismo, en colaboración con el sector privado, se fomentará la contratación de mujeres y se impulsará el autoempleo femenino, así como la visibilización del trabajo doméstico.

Otro de los apartados que se incluyen en el documento es la imagen de la mujer en los medios de comunicación con el fin de establecer parámetros de buenas prácticas a la hora de informar sobre estas cuestiones.

No obstante, ha precisado que se trata de un borrador que a lo largo del proceso, que se prevé que dure entre dos y tres meses, puede cambiar. Después, la norma se llevará al Consejo de Gobierno y al parlamento autonómico. La intención del Ejecutivo autonómico es que se acabe 2016 con una Ley de Igualdad.