En 2003 el Departamento de Justicia, Empleo y Seguridad Social del Gobierno vasco aprobaba su primer Plan Director de Seguridad y Salud Laboral con el objetivo de reducir el número de accidentes en el trabajo y, sobre todo, el número de accidentes mortales.

Pero las propuestas del Ejecutivo vasco no han conseguido frenar el número de accidentes laborales ni el número de trabajadores muertos. Entre enero y julio de este año se produjeron 29.147 percances, un 7% menos que en el mismo periodo del año pasado. Sin embargo, el número de trabajadores muertos en los siete meses (28) es el mismo.

Para los sindicatos, la causa está clara: falta concienciación entre los empresarios y los trabajadores. «Las estrategias del Gobierno vasco han fracasado y todo sigue igual», señala Jesús Uzkudun, responsable de salud laboral de CC OO.

Las organizaciones sindicales apuestan por endurecer las sanciones a las empresas que infrinjan las medidas de seguridad con multas más altas, incluso haciendo públicas las listas de empresas sancionadas. «Para las empresas, una multa es como calderilla; hay que jugar con la imagen empresarial», apunta Uzkudun.

En busca de mejorar la actual situación, el Gobierno ampliará un 30% su presupuesto para seguridad laboral en los próximos tres años, con el objetivo de reducir la siniestralidad en un 17%.