La madre del niño que denunció abusos admite que "no quería ver" y el padre dice que le acusa por amenazas de ella

El hombre juzgado en Vigo por un delito continuado de abusos sexuales a su hijo menor de edad ha considerado que el menor le acusa porque "está amenazado por su madre y su tío"; mientras que la madre ha insistido en la veracidad de los abusos y ha reconocido su "culpa como madre" por no verlos, ante lo que ha dicho que "no quería ver", porque quería que fueran "una familia feliz".

El juicio por estos hechos ha comenzado este miércoles en la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, donde han declarado los padres y el tío del niño, allegados del acusado, el orientador del colegio y dos peritos que examinaron al menor, quien en el momento en que se iniciaron los hechos enjuiciados tenía 7 años de edad.

El acusado, que ha confirmado que entre su pareja y él hubo denuncias cruzadas por agresiones, ha defendido que la relación con el niño —hijo de ella y adoptado por él— era "muy buena, excelente", y que los juegos eran inocentes, y ha mantenido que la relación entre ellos cambió a raíz de las "amenazas de la madre", quien ha dicho que impedía al hijo que hablara con él.

La madre por su parte, ha comentado que notó un cambio en el comportamiento del niño, pero lo achacó a que no era su padre verdadero. Según dijo en una declaración en la que ha incurrido en contradicciones, en su presencia "no pasaban" esos abusos, si bien posteriormente ha admitido que vio los besos y sabía que tenía marcas de mordiscos en el culo y chupones en el cuello.

Dos peritos —una psicóloga y una médico forense del Imelga— han trasladado que durante el examen el niño mostró "un lenguaje verbal y no verbal muy congruente" y han valorado su relato como "creíble". No obstante, el orientador del colegio ha apuntado que no apreció en el niño indicadores de abusos sexuales y que ni él ni profesores detectaron "nunca" que tuviera marcas.