El regreso de las vacaciones y la vuelta al trabajo se hará este año más penosa para los cordobeses. Y no será por el polémico síndrome posvacacional, para muchos médicos la excusa tras la que se ocultan los desganados. El horno en el que se ha convertido la ciudad es el principal motivo de depresión para muchos cordobeses. El inicio de este septiembre está siendo uno de los más caluroso desde hace 30 años. Así lo confirman las estadísticas. En las últimas tres décadas, la temperatura máxima ha sido de 32 oC, según datos facilitados por la empresa de predicción meteorológica Meteotemp. Las mismas fuentes indican que en lo que va de mes y hasta el domingo la media será de 34 oC.

Para colmo, septiembre empieza poniendo a los cordobeses de nuevo en alerta por la subida de las temperaturas. El Instituto Nacional de Meteorología (INM) ha declarado hoy la alerta amarilla en la provincia por el calor, ya que se prevé que la máxima sea de 38 oC.

Lloverá mucho más

Los meteorólogos prevén que al final las temperaturas vuelvan a los índices normales de todos los años. Señalan que este mes se mantendrá «dentro del rango de los valores normales registrados». De hecho, el domingo descenderán las máximas y se prevé para ese día una temperatura de 30 oC.

Por último, los expertos de Meteotemp indican que las precipitaciones esperadas este mes serán un 25% superiores a las de la media.

ESTE AÑO SE SUDÓ MÁS EN AGOSTO

Este verano está siendo uno de los más calurosos de los últimos años. La temperatura máxima de media del pasado agosto fue superior a la contabilizada en el mismo periodo de 2006. Así lo indican fuentes del INM, que señalan que el mes pasado se registró una media de 43,2 oC frente a los 42,5 oC del mismo periodo de hace un año. Las mismas fuentes indican que el agosto más caluroso de los últimos cinco años se registró en 2003, época en la que llegó a una temperatura media de 46,2 oC. Otro agosto muy caluroso fue el de 2005, donde la media de las temperaturas máximas fue de 44,8 oC.