La Diócesis de Zamora ha presentado este martes un minucioso trabajo de restauración de la talla 'Virgen de Belén' una pieza del siglo XVII que, debido a la gran devoción que despertaba, sufrió una gran erosión de su policromía.

Se trata de una pieza realizada en madera de pino, con dimensiones 60x31x26, que refleja un busto de la Virgen con el niño, una visión maternal que se encontraba en la capilla de San Marcos (Toro) aunque tras su derribo pasó al convento de Santa Clara, en la misma localidad zamorana.

Las monjas vendieron la obra a Bartolomé Chillón que la donó a la Catedral de Zamora en 1946.

El deán, José Ángel Rivera de las Heras, ha explicado que esta imagen corresponde a los Maestros de la Escuela de Toro y, tras varios estudios, se ha adjudicado a Sebastián Ducete, y fue realizada entre los años 1613-1615, con un estilo protobarroco.

En la presentación de los trabajos, que ha tenido lugar en la Sacristía de la Catedral, ha estado la restauradora, Patricia Ganado, y el director del taller, Bernardo Medina.

Ganado ha apuntado que se trataba de una pieza que estaba muy intervenida, fruto de la devoción que despertaba, con muchas capas de refresco con aceites que ahora se han eliminado para recuperar la policromía.

Una de las principales dificultades a lo largo de los cuatro meses de trabajo ha sido recuperar la carnación original y la reposición de dedos en el niño y la Virgen.

Tanto Ganado como Medina han insistido en el "exceso de culto" de esta pieza que "ha permitido su conservación pero también que se erosionase".

La Virgen de Belén volverá ahora a su lugar en el Museo Catedralicio, y no será parte de la exposición de Las Edades del Hombre 2016, aunque sí estuvo en 1988 en la de Valladolid, y en Nueva York, en 2002, con 'Tiempo de Espera'.