El portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Málaga, Juan Cassá, ha celebrado la decisión de los trabajadores de Limasa de ponerle fin a la huelga y ha pedido a instituciones, partidos y, en general, a todos los agentes económicos y sociales que redoblen los esfuerzos para recuperar las buenas expectativas de la Semana Santa.

El portavoz naranja ha recordado que se prevé la generación de casi 15.000 contratos en la provincia y ha esperado que la ciudad al menos iguale los 34 millones de euros que dejaron los visitantes el año pasado.

"Es el momento de celebrar que los ciudadanos dejan de ser los rehenes de la situación tras 11 días de huelga. Ya en frío, tocará hacer análisis en profundidad porque aquí no hay culpables únicos", ha anunciado, al mismo tiempo que ha lamentado que el acuerdo no se haya alcanzado antes.

"Para dejar casi todo en manos de los tribunales, cosa que es de sentido común, podríamos haber ahorrado esta situación porque Málaga ha estado en el escaparate nacional ofreciendo una pésima imagen que espero que estemos a tiempo de recuperar", ha añadido, a través de un comunicado.

Desde C's han confiado "en el esfuerzo laboral por recuperar la normalidad, en primer lugar por los malagueños, lo antes posible" y han recordado que la posición de la formación "ha sido en todo momento institucional y lanzando mensajes claros, pero cautos".

"Nosotros, por ejemplo, desconvocamos por puro sentido común la segunda sesión de la comisión de investigación de Limasa prevista para este viernes. Pero no todos los grupos han actuado con la misma responsabilidad", ha señalado, añadiendo que "en una situación de emergencia, lo que hicimos fue brindarle nuestro apoyo al Ayuntamiento por preservar el interés general de la ciudad".

Eso, ha indicado, "no significa que no haya habido muchos fallos también en la gestión del equipo de gobierno y en la inexplicable ausencia de los privados", aunque ha argumentado que "no es momento de abordarlos ahora en caliente. Hace falta que las aguas vuelvan a su cauce".

El concejal espera que no vuelvan a producirse estas situaciones en el futuro. "Al final, los rehenes de la situación son los malagueños. De eso, no cabe ninguna duda. Tenemos que intentar despolitizar todo lo que gira en torno a esta empresa y poner las relaciones laborales en el plano del que nunca debieron salir", ha concluido.