El titular de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha asegurado que, tras su declaración como persona non grata en Pontevedra, el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, seguirá "orgulloso" de ser gallego y pontevedrés, mientras que, quienes promovieron este pronunciamiento político, tendrán que "llevar la vergüenza" de haber impulsado "una decisión que conviene tomarse a broma".

"Porque ni constancia, ni sustancia; el presidente no intervino en las decisiones por las que ha sido declarado non grato", ha esgrimido, en la rueda de prensa posterior al Consello de la Xunta, en la que ha rechazado la participación de Rajoy en la prórroga a la factoría de Ence, materializada con un Gobierno en funciones.

"La ley de costas estaba antes de las elecciones y lo que han hecho el técnico correspondiente, de la dirección general correspondiente, del ministerio correspondiente, es aplicar una ley aprobada antes de las elecciones; de no aplicarse, cualquiera podría recurrir esa resolución y ganarla en el ámbito judicial", ha subrayado.

Feijóo ha asegurado que habló de este asunto con Rajoy tanto el fin de semana como en el Comité Ejecutivo de su partido del pasado lunes y que ambos confirmaron que "lamentablemente" Pontevedra sería conocida "por algo que no interesa a ningún pontevedrés ni a ningún gallego, por ser una ciudad donde no se respeta ni el resultado de las urnas".

Así, ha subrayado que "el candidato Rajoy ganó limpia, clara y contundentemente las elecciones" en Pontevedra, antes de apuntar que, en respuesta, los partidos que "perdieron" han hecho el "paripé" de la declaración como persona non grata, que considera "inaudito".

"Yo comprendo que haya distintas opiniones políticas, pero no es muy razonable que alguien orgulloso de ser Pontevedra y gallego sea declarado como persona non grata", ha zanjado.