La Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Torremolinos (Málaga) han firmado un convenio que garantiza la atención de 117 menores en situación de riesgo o desprotección del municipio a través de los Equipos de Tratamiento Familiar (ETF), que se localizan en los Servicios Sociales Comunitarios del Consistorio.

La delegada de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta, Begoña Tundidor, y el alcalde de Torremolinos, José Ortiz, han rubricado este jueves el correspondiente acuerdo del Programa de Tratamiento a Familias, que cuenta con un presupuesto de 239.941 euros en esta localidad, con una aportación de 79.240 euros por parte de la Administración local.

El pasado año, el plan trabajó con 61 familias con menores a su cargo. "Se trata de preservar los derechos de los menores y promover su desarrollo integral en su medio familiar, normalizando su situación", ha declarado la delegada, quien también ha destacado que con estas intervenciones se pretende "posibilitar el retorno del menor a la familia de origen, en aquellos casos en los que, tras la adopción de una medida de protección, se contemple la reunificación familiar como la alternativa prioritaria y más adecuada para los menores".

Por su parte, el alcalde de Torremolinos ha agradecido el "esfuerzo de la Junta por mantener los programas sociales" y ha destacado "la apuesta del Ayuntamiento por cubrir las necesidades básicas de las familias y sobre todo de los menores en riesgo de exclusión social".

El acuerdo forma parte de los convenios que se están suscribiendo con representantes de la Diputación y los 16 municipios malagueños de más de 20.000 habitantes —la capital, Vélez-Málaga, Coín, Nerja, Fuengirola, Estepona, Ronda, Marbella, Cártama, Rincón de la Victoria, Alhaurín el Grande, Alhaurín de la Torre, Torremolinos, Antequera, Benalmádena y Mijas—.

Para su puesta en marcha, la provincia cuenta con un presupuesto de 4,8 millones de euros, de los que cerca de 3,3 son aportados por la Junta de Andalucía y 1,5 por los municipios y la Diputación.

Programa de tratamiento a familias

El programa de Tratamiento a Familias con menores en situación de riesgo o desprotección tiene objetivos muy concretos: mitigar los factores de riesgo para evitar la separación de los menores del seno familiar, capacitar a la familia para dar una correcta atención a sus hijos —evitando cualquier conducta negligente o de maltrato—, lograr que la familia funcione de manera autónoma y adecuada, que los menores tengan una atención y cuidados acordes a sus necesidades y proporcionar las habilidades y recursos técnicos necesarios para superar la situación de crisis.

Su puesta en marcha se desarrolla a través de los Equipos de Tratamiento Familiar, que atienden principalmente a familias con carencias y dificultades en la cobertura de las necesidades básicas, cuya detección han realizado previamente los Servicios Sociales Comunitarios.

Asimismo, trabajan ante la aparición de indicadores de riesgo que requieren tratamientos específicos. La labor preventiva de los equipos de tratamiento, realizada con criterios de atención individualizada y proximidad, ha permitido en los últimos años un descenso del 11 por ciento en el número total de tutelas de menores por parte de la Administración autonómica.

En cuanto al sistema de financiación, la Junta ha hecho modificaciones con el fin de hacerlo más estable —se sustituye el mecanismo de subvenciones por otro de transferencias— y garantizar el respeto a la autonomía local, mediante la aprobación de un nuevo decreto regulador.

Igualmente, se ha introducido como novedad que los ETF deberán abordar de forma específica la problemática de la violencia familiar en los casos en los que hayan intervenido y colaborarán con los centros de atención a inmigrantes cuando haya menores en situación de riesgo o desprotección familiar, a través de protocolos de cooperación.

Entre enero de 2016 y abril de 2017, la Junta destinará más de 18 millones de euros para financiar la actividad de los 142 ETF —25 en la provincia de Málaga— que funcionan en la Comunidad y que atienden, cada año, a más de 6.000 familias —más de 1.240 en la provincia— y unos 12.000 menores —unos 2.400 en Málaga—.