La familia de una fallecida tras dar a luz en Valladolid recurre el archivo de la denuncia que presentó

Los Servicios Jurídicos de la Asociación de 'El Defensor del Paciente en Castilla y León' han recurrido el archivo de la denuncia presentada el pasado 21 de julio por el fallecimiento de una joven en el hospital Del Río Hortega de Valladolid a causa de una hemorragia horas después de dar a luz.

Los Servicios Jurídicos de la Asociación de 'El Defensor del Paciente en Castilla y León' han recurrido el archivo de la denuncia presentada el pasado 21 de julio por el fallecimiento de una joven en el hospital Del Río Hortega de Valladolid a causa de una hemorragia horas después de dar a luz.

Según explica la Asociación en un comunicado recogido por Europa Press el Juzgado de Instrucción ha dictado sobreseimiento de la denuncia presentada por negligencia, pero la familia de la fallecida lo ha recurrido.

La familia de la fallecida contactó con el letrado de la Asociación pocas horas después de conocer la muerte de la joven para denunciar unos hechos "tan graves e incomprensibles", por un posible homicidio por imprudencia profesional.

La fallecida, de 34 años y funcionaria de profesión ingresó el día 20 de julio a las 15.30 horas para inducción al parto de forma programada en el Hospital Del Río Hortega de Valladolid. La paciente ya había acudido previamente a las 8.30 horas, cuando estaba citada, pero fue remitida a su domicilio "por falta de camas", por lo que la mandaron volver a las 15.30.

Todo transcurrió "con normalidad", según el relato de la Asociación, hasta las 20:00 horas, hora en que en la Sala de dilatación la parturienta comienza a sangrar y a sufrir mareos. Las matronas que le asisten "en ningún momento se plantean llamar al ginecólogo para exploración de la paciente, a pesar de los continuos requerimientos de la pareja de la fallecida, presente en la Sala y testigo de la discusión que mantenían las matronas entre ellas por la falta de control de la hemorragia incesante".

Según el relato, "la hemorragia continuó sin control ninguno llegando la parturienta a perder el conocimiento con una bajada de tensión severa en la que se temió no sólo por su vida, sino también por la del bebé".

Después de este episodio, se le administró anestesia epidural, quedando la paciente adormilada y sin más controles de tensión hasta el alumbramiento.

A la 1.30h de la madrugada del día 21 de julio nació el bebé y se inicia episiotomía "por parte de la ginecóloga en prácticas", que apreció que la madre sangraba "abundantemente" y "sufría desvanecimientos", pero "aun así decidió no llamar al ginecólogo de guardia porque la matrona que la asiste le restó importancia y la persuadió de que no lo hiciera y siguiera cosiendo los puntos".

Según la Asociación, "la necesaria actuación urgente ante una hemorragia que hay que suplir rápidamente mediante transfusión sanguínea se demora porque la ginecóloga en prácticas que la atiende no es capaz de llamar a la ginecóloga responsable, dejándose influenciar por personal menos cualificado que le decía que era normal que sangrara después de un parto largo".

Así, consideran que "se perdió un tiempo valiosísimo hasta que llegó el ginecólogo de urgencias antes de comenzar con la transfusión que tiene lugar a las 3.30 horas, lo que suma un total de 7 horas y media de sangrado continuado".

"Las órdenes médicas correspondientes a la urgencia del caso se dan tarde y apresuradamente, dando lugar al trágico desenlace y a las 5.00 horas avisan a la familia del fallecimiento", han añadido.

La Asociación ha añadido que resulta "inexplicable" que tras la solicitud de autopsia judicial solicitada por la familia y acordada por el Juzgado de Guardia, "el Hospital procedió a la destrucción de la placenta, aduciendo que es lo habitual cuando hay un parto sin incidencias reseñables".

El médico forense concluyó que el fallecimiento se debió a una hemorragia por embolia de líquido amniótico, "complicación súbita e impredecible". Ante estas conclusiones, el Juzgado de instrucción acordó el archivo de la causa.

Sin embargo, los denunciantes consideran que "quedan sin aclarar múltiples cuestiones" como si "recibió la paciente una adecuada asistencia durante las horas previas, cuando comenzaron a producirse las hemorragias, si se actuó correctamente durante todo este tiempo, por qué no se avisó en esos momentos a un ginecólogo que atendiera la situación o si se tomaron las medidas oportunas de control de la hemorragia, corrección de las alteraciones de coagulación".

Por todas estas dudas, han recalcado, el letrado de la familia ha recurrido el archivo, con el fin de continuar las actuaciones hasta poder aclarar éstas y otras dudas sobre la asistencia dispensada a la fallecida.

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