La Empresa Provincial de Residuos y Medio Ambiente de la Diputación de Córdoba (Epremasa) ha puesto en marcha, con la colaboración de Ecovidrio, una campaña para impulsar el reciclaje de ese material en el sector hostelero de la localidad cordobesa de Peñarroya-Pueblonuevo, a la que se han adherido más de 40 establecimientos.

A la presentación, que ha tenido lugar este viernes, ha asistido la delegada de Medio Ambiente de la institución provincial y presidenta de Epremasa, Auxiliadora Pozuelo, acompañada por el alcalde del municipio, José Ignacio Expósito, la gerente de zona de Ecovidrio, Coral Rojas, y ha agradecido a los empresarios su implicación en esta campaña.

Pozuelo ha resaltado "el compromiso de Epremasa en la gestión y tramitación de la recogida de residuos y con Ecovidrio queremos aumentar la recogida de vidrio en la hostelería, porque este sector supone el 50 por ciento del total de la recogida".

Gracias a esta iniciativa, no sólo se va a dar un servicio totalmente novedoso, sino que además se van a mejorar las cifras de reciclado en esta localidad. La iniciativa ha comenzado con una primera fase de encuestas y entrevistas a los establecimientos para conocer de primera mano cuáles son sus necesidades y poder adecuar los recursos existentes.

Además, Ecovidrio ha ofrecido información detallada a los locales de cómo reciclar correctamente y de las ventajas sociales y medioambientales que tiene el reciclaje de los envases de vidrio.

En una segunda fase, se han instalado 12 contenedores 'Vacri', dotados con una boca más ancha y un sistema de elevación hidráulico, que permiten el reciclaje de grandes cantidades de vidrio como las generadas por los hosteleros y cinco contenedores con bocas industriales. También se van a entregar 81 cubos con ruedas de diversas capacidades para facilitar el transporte de los residuos de vidrio y su posterior vaciado en los contenedores.

Según los últimos datos disponibles de 2014, los ciudadanos de Peñarroya-Pueblonuevo reciclaron un total de 60.561 kilos de envases de vidrio. Esto supone que cada habitante recibió una media de unos 5,30 kilos de vidrio al año. En cuanto a la tasa de contenerización, la localidad dispone de un total de 31 contenedores instalados, por lo que hay un contenedor por cada 369 habitantes.