La alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, se ha trasladado esta mañana al entorno de la calle Piqueras, a una zona que en estos años ha sufrido una profunda transformación ligada al soterramiento, una renovación que ahora culmina con la construcción del vial de conexión de Piqueras con la glorieta que ha sido construida entre Piquete y Pedregales.

"Este vial estaba incluido de modo prioritario en el Plan de Infraestructuras y ha sido ejecutado mejorando de este modo la circulación del Este de la ciudad, lo que supone mayor accesibilidad y cercanía entre barrios, entre personas", tal como ha declarado la alcaldesa.

El recorrido ha sido realizado en compañía de vecinos de la zona, "que han visto sustancialmente mejorada su calidad de vida, las condiciones y servicios del barrio". Unos ciudadanos a los que Gamarra ha agradecido su paciencia "tanto durante las obras como en la tramitación previa de las mismas".

Se trata de una actuación que el Ayuntamiento ha llevado a cabo conjuntamente con la Sociedad Logroño Integración del Ferrocarril 2002, gestora de parte de los terrenos afectados ya que estaban incluidos en el PERI Ferrocarril, por lo que la gestión ha sido un poco más compleja.

Así, fue preciso firmar previamente un acuerdo con LIF 2002, al asumir ésta un 40 por ciento de la inversión. Ha sido de 1.233.261,97 euros el total invertido, para un proyecto que ha consistido en la construcción de un vial desde la confluencia de Piquete y Pedregales hasta Piqueras.

El vial consta de dos calzadas, con dos carriles cada una, separadas por una mediana central ajardinada y aceras en ambos lados. Una de las márgenes cuenta con un amplio tramo de carril bici.

"La reurbanización ha sido ejecutada teniendo en cuenta las posibilidades de la zona, con espacios amplios que permiten dotarla de calles y aceras con mucha anchura, carril bici, zonas ajardinadas, nuevos servicios... aprovechando al tiempo el arbolado pre existente", ha dicho.

Se ha renovado además el alumbrado y el mobiliario urbano. El nuevo vial es además una de las actuaciones "prioritarias" del Plan de Infraestructuras (2012-2025) que mejora la red de comunicaciones de todos los logroñeses, especialmente los residentes en el barrio de Cascajos.

"facilitar la vida a los ciudadanos".

En este sentido la alcaldesa ha recordado que durante el pasado Mandato y continuando en éste, Cascajos ha sufrido "una verdadera revolución en sus accesos. Desde la apertura a Lope de Vega junto a la rotonda de avenida de Madrid, pasando por las rotondas de Pedregales y ahora con el vial Piquete-Piqueras".

Se favorecen las conexiones con el Hospital San Pedro y con el barrio de La Estrella y, en general, con toda la ciudad a través de la circunvalación. "Seguimos uniendo personas, estrechando relaciones, que es el objetivo último de todas las obras de infraestructura que estamos acometiendo. La ciudad se articula para hacer más fácil la vida de los logroñeses", ha añadido.

El proyecto ha incluido también la construcción de una glorieta entre las calles Piqueras, Baltasar Gracián y Arquitectos Álamos y Ceballos. Asimismo se han realizado labores de ajardinamiento e integración paisajística de la acera norte con el Parque Felipe VI.

Para acometer el proyecto ha sido necesario demoler unas edificaciones de 1.800 metros cuadrados en total, la mayoría de antiguo uso industrial que se encontraban ya sin actividad. Se han colocado 16.850 metros cuadrados de pavimento de baldosa hidráulica para las aceras y 2.140 metros cuadrados de bordillo de hormigón.

Las canalizaciones de saneamiento instaladas alcanzan una longitud de 270 metros; las de abastecimiento, 366 metros. La zona cuenta además con 14 nuevas luminarias y 10 bancos. La obra ha sido ejecutada por la UTE riojana OHL-Antis.