Santiago concentró hoy las celebraciones del Día de Galicia, que ha reunido en la capital gallega a miles de peregrinos y visitantes de todos los rincones de España y el mundo. Los festejos dieron comienzo a medianoche, con la tradicional quema de la fachada de la catedral, a la que este año acompañó un espectacular juego de luces y fotografías proyectadas sobre el monumento. Las celebraciones incluyen también espectáculos para todos y durante toda la jornada música y humor han llenado las calles compostelanas. Y esta tarde habrá una nueva edición del Certame do Traxe, abierto a todos los que quieran participar.

Alusiones al Estatuto

Pero además de fiesta, el Día de Galicia también se ha visto acompañado de reivindicaciones políticas, en las que ha cobrado un especial protagonismo la reforma del Estatuto. El presidente de la Xunta,  Emilio Pérez Touriño, durante la tradicional ofrenda de los socialistas ante el monumento de Alfonso Rodríguez Castelao en Rianxo (A Coruña), retomó su "apuesta" por mejorar el Estatuto y que aunque la primera tentativa de reforma "no pudo ser", las fuerzas del galeguismo garantizarán un nuevo texto "más pronto que tarde".

Por su parte, el vicepresidente Anxo Quintana, que encabezó una manifestación del BNG por las calles de Santiago a la que asistieron unas 15.000 personas (según la Policía, fueron 7.000), insistió en la necesidad de que Galicia alcance la autodeterminación, pero a través de "mayores cuotas de gobierno" y no mediante un plebiscito. "Galicia se mueve por la fuerza y el impulso de una mayoría social clara y rotunda que apuesta sin miedo y sin complejos por tener el Estatuto de primera que quiere", afirmó Quintana.

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