El portavoz municipal de Izquierda Unida en Sevilla, Daniel González Rojas, ha señalado este lunes que su formación política "continúa a la espera" de que el Gobierno de Juan Espadas (PSOE) "se decida algún día a poner en funcionamiento" el grupo de trabajo llamado a reformar el reglamento orgánico del Ayuntamiento, tal y como se aprobó en el Pleno del Consistorio hispalense celebrado en julio de 2015.

A través de un comunicado, González Rojas ha recordado que la presidenta del Pleno, Carmen Castreño, se comprometió entonces a dar un borrador en unas semanas pero, "seis meses después, seguimos sin noticias al respecto". Por eso, el portavoz de IU no ha ocultado su sorpresa y malestar ante las últimas declaraciones del alcalde, en las que aseguraba que se está trabajando en este asunto, "ya que la realidad es que con los grupos municipales no se ha hablado ni contado hasta ahora para nada".

"Desde Izquierda Unida ya pusimos en marcha en septiembre un grupo de trabajo con asociaciones y secciones sindicales del Ayuntamiento para consensuar y perfilar nuestras iniciativas de cara al debate sobre la reforma del reglamento orgánico del Ayuntamiento, pero se ha tenido que paralizar ante la falta de respuestas por parte del Gobierno municipal", lamenta González Rojas.

Según agrega, fruto de aquel trabajo conjunto resultó una batería de propuestas entre las que destacan, por ejemplo, la posibilidad de implantar la revocabilidad de los concejales o de sacar adelante mociones de censura ciudadana "para que cualquier vecino pueda poner de patitas en la calle a aquel edil o alcalde que no cumpla con sus funciones" o la obligatoriedad de emprender audiencias públicas por los cargos electos.

La federación de izquierdas también aboga por facilitar y promocionar el conocido como "turno ciudadano", que ya existe, por rebajar los criterios para poner en marcha comisiones de investigación y por reglamentar el proceso de elaboración y debate de las ordenanzas fiscales y presupuestos "al objeto de evitar los retrasos que hemos vivido últimamente".

No a dos sesiones plenarias

En lo relativo al funcionamiento de los plenos municipales, IU no ve la necesidad de dividirlos en dos sesiones, como plantea Espadas, sino que apuesta por dotar a las comisiones delegadas de "capacidad deliberativa y de competencias adecuadas para aprobar directamente ciertas cuestiones con el fin de ganar en agilidad y de acortar la duración de los plenos".

Igualmente, IU considera que la Comisión de Ruegos, Preguntas e Interpelaciones del Ayuntamiento debería convertirse en una verdadera herramienta de seguimiento del Gobierno local, "a imagen y semejanza de las sesiones de control del Parlamento", donde el alcalde y los delegados tengan que rendir cuentas de su gestión ante las preguntas de la oposición y de los ciudadanos. Por ello, Rojas propone darle un carácter público y abierto a esta comisión.

Junto a estas iniciativas, IU propone también que las mociones de los diferentes grupos municipales se publiciten en la web del Consistorio, especificándose el grado de cumplimiento de cada una de ellas, "para que a través de un simple vistazo cualquier ciudadano pueda saber lo que se ejecuta y lo que, por el contrario, queda en saco roto".

"más y mejor participación ciudadana"

De otro lado, IU sostiene que la reforma del reglamento orgánico del Ayuntamiento ha de ir de la mano de la reforma del reglamento de participación ciudadana, cuyo grupo de trabajo sí está creado y donde asegura que sólo Izquierda Unida ha puesto sobre la mesa, hasta ahora, una batería de propuestas como la regulación de consultas populares, los presupuestos participativos, la elaboración participativa de ordenanzas y reglamentos o mecanismos de seguimiento y evaluación de las políticas municipales.

González Rojas defiende, además, que el futuro reglamento ha de contemplar el "derecho a la iniciativa", tanto de los vecinos (mayores de edad o no) como de las entidades (con personalidad jurídica o no). "Dicho de otra forma, que el Ayuntamiento no tenga que ser el que dé el primer paso y que cualquier persona o asociación pueda proponer y promover un proceso participativo", concluye.