Hay quien va a la Campus a hacer amigos o a conocer nuevos trucos para los juegos de ordenador, pero también hay quien aprovecha su estancia para sacarse un dinerillo. Es el caso de David Sanz, un catalán de 28 años que acude desde hace siete a la Campus Party y que lleva cuatro haciendo de hombre-anuncio.

La idea surgió hace cuatro años, cuando un comerciante de su pueblo le pidió que se pusiera una camiseta para patrocinar su tienda. Al ver que dio resultado, al año siguiente, le llovieron un montón de ofertas. Ahora, además de hacer publicidad a diferentes empresas también vende productos como robots de última generación, fly-jumpers (son unos alzadores con los que se puede saltar hasta una altura de tres metros) y camisetas de diferentes diseños y colores.

Por otra parte, David y participantes de la Campus han creado un cuaderno de bitácora a la antigua usanza, o sea en papel, en el que todo el que quiera puede estampar su firma. El objetivo, como él mismo explica, es que «dentro de unos años, la organización lo pida y se haga un gran dossier en forma de recuerdo».

Albert Hubo y PC personalizados

El robot más avanzado del mundo, Albert Hubo, visitó la Campus Party ayer, tras el encendido oficial de los 5.500 ordenadores. Para hoy, los cerca de 7.000 participantes podrán disfrutar de una divertida clase de pintura digital y de una entrevista al experto en informática Kimiko Ryokai. Además, Janni Pönkkö contará sus secretos de modding para tunear la computadora.