El portavoz del grupo municipal de Zaragoza en Común (ZEC) en el Ayuntamiento de Zaragoza, Pablo Muñoz, ha insistido en expresar la oposición al impuesto de contaminación de aguas, que comenzaría a aplicarse por el Gobierno de Aragón a partir de enero de 2016, porque "se ha creado sin el acuerdo" con el consistorio

El también consejero municipal de Urbanismo y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Zaragoza, ha aclarado que el Gobierno de la ciudad se opone a ese nuevo impuesto por "haberlo encontrado en la gatera de una ley sin el acuerdo con los zaragozanos".

A su parecer, "los grandes asuntos de ciudad y el crear un impuesto vinculado a la depuración cuando ya hay una tasa tiene que ser acordado con el Ayuntamiento".

Tras dejar claro que "nos oponemos" ha indicado que "así lo hemos trasladado al resto de portavoces para buscar la unanimidad en el posicionamiento, que no se ha dado", ha informado.

En declaraciones a los medios de comunicación, Muñoz ha precisado que en la reunión de la Junta de Portavoces de este lunes, "hemos hecho una propuesta de que la autonomía municipal tiene que estar por encima de cualquier cosa y que un asunto tan importante para la ciudad tiene que contar con el Ayuntamiento, pero el resto de portavoces no todos lo veían así".