El exalcalde de Ponteareas Salvador González Solla (PP) ha declarado este jueves como imputado en el marco de la 'Operación Patos', para defender que todas sus actuaciones se hicieron con "informes favorables" de los técnicos municipales y "en base a la ley". Además, ha asegurado que no recibió "ningún regalo a cambio de ningún acuerdo".

Así lo ha comunicado el exregidor a la salida del Juzgado de Instrucción número 2 de Ponteareas, a cargo de la pieza separada de la localidad, donde ha comparecido durante más de una hora, si bien tanto su declaración como la de otros miembros de la anterior corporación municipal citados —la exconcejala de Hacienda, Belén Villar; la secretaria municipal y la interventora— han sido suspendidas 'sine die', después de que abogados hayan pedido acceso a las grabaciones.

González Solla, que ha asegurado estar "tranquilo" y que acudió al juzgado a "declarar y sobre todo aclarar", ha respondido a las preguntas de todas las partes y ha remarcado que hay "mucha confusión sobre estas cuestiones que se han planteado", a colación de lo que se ha referido específicamente a la planta potabilizadora, que ha sido el único tema tratado este jueves en su comparecencia.

"Todo lo que se hizo se hizo correctamente, en base a todos los informes favorables por todos los técnicos municipales, y entiendo que nuestro actuar ha sido correcto y en base a la ley", ha subrayado, antes de indicar a preguntas de los periodistas que no ha recibido "ningún regalo a cambio de ningún acuerdo, y menos de estos temas".

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