La Agencia de Guipuzcoana de Infraestructuras Bidegi ha finalizado los trabajos de inspección y revisión anual del estado de todos los ventiladores de los túneles de la AP-1 y la AP-8 en su tramo guipuzcoano.

En total se han comprobado, uno por uno, los 230 aparatos que conforman el sistema de ventilación de las 20 galerías de más de 500 metros que disponen de los mismos en aplicación de la directiva europea de seguridad en los túneles.

Según ha informado en un comunicado, cada aparato ha sido sometido a pruebas de máxima potencia y "todos han respondido de modo óptimo". Los trabajos han sido ejecutados por operarios de Bidelan en horario nocturno para minimizar las afecciones al tráfico al tener que cortar el carril correspondiente al ventilador.

Las inspecciones se han realizado por medio de un vehículo provisto de una plataforma elevadora que acercaba al técnico a cada uno de los aparatos de ventilación. Tras la inspección, este ordenaba al centro de control correspondiente la activación manual y a su máxima potencia tanto en modo de extracción, desde el interior hacia fuera, como de aspiración, de fuera a dentro.

La agencia foral ha recordado que el correcto funcionamiento de los ventiladores "es fundamental para mantener los niveles de aireación y oxigenación de los túneles y garantizar la visibilidad en su interior". Además, ha señalado que "juegan un papel clave" en caso de cualquier incidente dentro del túnel.