La distancia entre los sueldos que cobran los hombres y mujeres se cierra progresivamente, pero a un ritmo tan lento que tardará 118 años en desaparecer. Así lo explica el Foro Económico Mundial en su Informe Global de la Brecha de Género 2015, que cifra en apenas un 3% el recorte de la llamada brecha salarial en los últimos 10 años en todo el mundo.

"Los avances hacia la igualdad salarial y paridad en el mercado de trabajo se han estancado notablemente desde 2009; al ritmo actual la brecha salarial solo desaparecerá por completo en 2133", dice el estudio. "Pese a la incorporación de 250 millones de mujeres al mercado de trabajo desde 2006, la desigualdad persiste y las mujeres ganan ahora lo mismo que los hombres hace una decada".

Las sociedades más igualitarias siguen siendo las nórdicas: Islandia lidera la clasificación, seguida por Noruega y Finlandia. En Latinoamérica destaca la posición de Nicaragua (12º, el país que más ha reducido su brecha de género desde 2006), en África la de Ruanda (6ª) y en Asia la de Filipinas (7º). El Foro Económico Mundial explica que de los 145 países analizados, solo seis no han logrado reducir su brecha de género en los últimos diez años: Sri Lanka, Mali, Croacia, Eslovaquia, Jordania e Irán.

El informe del Foro Económico Mundial se publica desde 2006 y mide la distancia global de género, no solo en aspectos de oportunidades económicas, sino también en salud, educación y política. Según su análisis, que parte de datos de la OIT, de la ONU y de datos propios, la brecha conjunta en todos esos ámbitos se ha reducido un punto más, un 4%.

La brecha de género en España se ha recortado en el último año hasta el 74,2% —el 0% es desigualdad total y 100% es igualdad plena— y escala cuatro posiciones en el ranking respecto a 2014. Sin embargo, nuestro país sigue por debajo del nivel de igualdad antes de la crisis (74,5%).

Además, España se sitúa en el puesto 24º, muy lejos de las economías europeas más avanzadas, por debajo de países como Bermudas, Jamaica, Ruanda o Filipinas y solo por encima de otras economías cercanas como Italia.

La evolución de España en cuestiones de igualdad difiere según el criterio. La distancia en Educación entre hombres y mujeres es mínima: un 99,8% de las mujeres disfrutan de tantas oportunidades como los hombres, un porcentaje casi similar al de 2006, cuando ya ascendía al 99,4%. También en salud y seguridad existe un patrón de igualdad: el porcentaje de igualdad se eleva al 97,2% y casi estable desde hace diez años.

Sin embargo, la educación similar no se traduce en igualdad laboral. España desciende en el ranking a la posición 67 en participación y oportunidades económicas para sus mujeres, que solo alcanzan el 67,7% de la salud financiera de los hombres. Y dentro de este criterio, especialmente mala es la situación en el salario que se paga a hombres y mujeres por el mismo trabajo (57%, por debajo de la media mundial y posición 106 en el mundo), así como en la ocupación de puestos de dirección (45% y posición 66 en el mundo).

Tampoco España sale bien en la foto del empoderamiento político: la representación femenina en las estructuras de tomas de decisión apenas alcanza el 32,6%, diez puntos menos que en 2006 (42,1%). España ocupaba la 5ª posición durante la legislatura de Zapatero y ahora ocupa el puesto 26º. El informe destaca que en nuestro país no hemos tenido nunca un presidenta del Gobierno. Y además, la participación de ministras en nuestro Ejecutivo es el 44% de la participación masculina (posición 24 en el ranking), mientras que la de diputadas en el Parlamento de un 77% (posición 13)