El socialista Antonio Arrufat fue elegido ayer como nuevo presidente de la Diputación Provincial de Teruel, con 15 votos a favor, que le garantizan la mayoría absoluta: los de su propia formación, los del PAR, salvo un disidente del partido de Utrillas, y los del representante de CHA. Por su parte, los representantes del PP votaron a su propio candidato. En principio, los dos votos en blanco que se produjeron se atribuyeron a los diputados de IU y de CHA. Pero este último, José Navarro, aseguró que votó por Arrufat y luego se supo que ese voto en blanco correspondía a un disidente del PAR. Los socialistas se han comprometido a ceder parcelas de poder a sus aliados regionalistas, y también al representante nacionalista. Arrufat subrayó precisamente que su objetivo era la «conjunción de fuerzas múltiples» en la gestión del órgano provincial.