El Cabildo de Gran Canaria ha comenzado este viernes los trabajos de reparación de la GC-550, la carretera de Temisas, donde el pasado 23 de octubre se produjo el desplome de la calzada por las intensas lluvias.

En un comunicado, la Corporación insular explicó que ha declarado la obra de emergencia para agilizar los plazos y evitar mayores perjuicios a los usuarios de la vía.

La carretera permanece cerrada el tráfico en el tramo que conecta la GC-65, conocida como carretera de Los Cuchillos, con el barrio de Temisas y el núcleo de Agüimes, lo que afecta a la comunicación entre los cascos urbanos de Santa Lucía de Tirajana y Agüimes.

Por su parte, las últimas lluvias caídas provocaron el deslizamiento de un muro de sostenimiento de unos 14 metros de altura situado en el margen derecho de la carretera, llevándose consigo el carril exterior de la vía, una superficie de 60 metros cuadrados de calzada.

Reposición del muro

Los trabajos consistirán en la reposición del muro caído y el tratamiento de otros muros de contención existentes en ese tramo que también se encuentran en mal estado para evitar que se produzcan nuevos fallos estructurales.

Asimismo, los técnicos de la Consejería de Obras Públicas del Cabildo estiman que la carretera estará abierta al tráfico en dos meses y medio, y la obra totalmente concluida un mes más tarde. La intensidad media diaria de tráfico es de 516 vehículos en el tramo de Santa Lucía a Temisas y de 893 vehículos en el tramo de Temisas a Agüimes.