La secretaria general de UGT en Andalucía, Carmen Castilla, ha instado a "reflexionar" sobre el uso de las "imputaciones como arma arrojadiza" y ello tras el archivo de la causa abierta sobre la adjudicación a la agrupación empresarial México-Minorbis de los derechos de explotación del yacimiento minero de Aznalcóllar.

Así lo ha indicado este jueves en La Carolina (Jaén) a preguntas de los periodistas sobre esa decisión judicial, ante lo que ha subrayado que son "respetuosos con la justicia" y siempre ha dicho que "la presunción de inocencia es lo más importante". "Si la pido para mi sindicato, la pido para todo el mundo", ha apostillado.

Ha considerado "curioso" cómo "se hacen campañas demoledoras contra las instituciones y la gente" y ha recalcado que "hasta que no está el proceso terminado con una sentencia condenatoria no se puede demonizar a nadie", algo que, sin embargo, está "sufriendo" UGT-A. Al hilo, ha incidido en que es fundamental la presunción de inocencia y un "proceso garantista", de modo que cuando éste acabe, "si alguien ha hecho algo tendrá que dar la cara en los tribunales".

"Y no utilizar las imputaciones como arma arrojadiza entre los partidos políticos porque la ciudadanía está cansada de eso también. Y si no son los partidos, nos utilizan a los sindicatos, que dicen que estamos más afines a un partido que a otro, para echarle a ese partido en la cabeza las imputaciones del sindicato", ha afirmado Castilla.

Por ello, a su juicio, "no es novedoso" lo ocurrido con el caso Aznalcóllar. Ha defendido, además, la necesidad de que todos los que se dedican a la vida pública reflexionen, porque "la ciudadanía está harta, y no utilizar los temas judiciales, que no existan juicios paralelos para echarle a la cabeza y ganar de esa forma en las urnas".

"En las urnas hay que ganar con propuestas, convencer a la ciudadanía; no con el mismo arma arrojadiza porque al final tenemos este tipo de sorpresas, que no son sorpresas, hay siempre que confiar en la justicia", ha concluido la secretaria general de UGT en Andalucía.