Complejo Astronómico de La Hita en Toledo vuelve a detectar dos nuevos fragmentos del cometa Encke entrando en atmósfera

El Complejo Astronómico de La Hita en Toledo ha vuelto a detectar sobre las 21.49 horas de este viernes la entrada en la atmósfera de dos nuevos fragmentos del cometa Encke, con sendas explosiones que también fueron registradas en los observatorios astronómicos de Calar Alto (Almería), la Universidad de Huelva, La Sagra (Granada), La Pedriza (Jaén) y Sevilla.
Bólido
Bólido
J.A. DE LOS REYES Y SENSI PASTOR/UHU-CSIC
Bólido

El Complejo Astronómico de La Hita en Toledo ha vuelto a detectar sobre las 21.49 horas de este viernes la entrada en la atmósfera de dos nuevos fragmentos del cometa Encke, con sendas explosiones que también fueron registradas en los observatorios astronómicos de Calar Alto (Almería), la Universidad de Huelva, La Sagra (Granada), La Pedriza (Jaén) y Sevilla.

De acuerdo con el análisis llevado a cabo por el Profesor José María Madiedo de la Universidad de Huelva, el evento ha estado producido por la colisión contra la atmósfera a gran velocidad de un fragmento de hielo y roca procedente del cometa, y el brusco choque con el aire tuvo lugar a más de 100.000 kilómetros por hora y a unos 110 kilómetros de altitud sobre el norte de Marruecos, ha informado el Complejo Astronómico en nota de prensa.

A pesar de la distancia, el brillo de la bola de fuego fue tan intenso que ésta pudo contemplarse desde el sur y el centro de España. Tras el impacto la bola de fuego consiguió penetrar en la atmósfera unos 50 kilómetros antes de que todo el material se destruyese completamente, sin conseguir llegar al suelo.

Un segundo fragmento procedente del mismo cometa impactó contra la atmósfera pocas horas después, cuando pasaban unos 17 minutos de la medianoche. Esta vez la colisión ocurrió sobre la vertical de la provincia de Córdoba. En este caso la bola de fuego se inició a unos 106 kilómetros de altitud y se extinguió cuando se encontraba a unos 70 kilómetros de altura sobre la localidad cordobesa de Montilla.

Ambos eventos guardan relación con los fenómenos similares que se registraron el pasado 28 de octubre, cuando dos rocas procedentes del mismo cometa generaron espectaculares bolas de fuego sobre Madrid y sobre el Mediterráneo.

Los fragmentos desprendidos del cometa Encke son en su mayor parte más pequeños que un grano de arena y se cruzan con la órbita de la Tierra durante los meses de octubre y noviembre, produciendo a lo largo de ese periodo varias lluvias de estrellas conocidas como Táuridas.

Sin embargo, los astrónomos anunciaron que durante 2015 estos fragmentos serían de un tamaño muy superior a lo habitual, por lo que su impacto contra la atmósfera podría producir bolas de fuego inusualmente brillantes. Por este motivo cabe esperar que a lo largo de las próximas noches estos fenómenos vuelvan a repetirse.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento