Un total de 60 niños saharauis pasarán este verano en la provincia de Teruel, acogidos en otras tantas familias, dentro del programa "Vacaciones en paz".

Los niños se encuentran ya en Teruel, después de que hayan llegado a la capital turolense este medio día.

En el caso de la capital y las localidades cercanas se trata de 14 niños, de entre 12 y 7 años, que llegan de la mano de la asociación Lespista, que en saharaui significa referéndum, y aquí se quedarán los dos próximos meses, para evitar la dureza del clima del desierto, donde se puede llegar a alcanzar los 50 grados a la sombra.

Una de las responsables de la asociación, Pilar Alcaire ha explicado que "para las familias supone dos meses de convivencia plena con un niño que te aporta un montón de cosas, pero sobre todo el cariño y los vínculos que se crean con ellos y su familia porque también estás en contacto con ellos".

Alcaire ha destacado que lo único que pide la asociación es que se les practique una

En cuanto a los niños, Pilar Alcaire aclara que "ninguno viene falto de cariño, viven en una familia estructurada y esa parte está totalmente cubierta".

Aunque también es cierto, que "carecen de lo más material, a veces tienen carencias de comida, de higiene o de sanidad. Les faltan cosas, pero son niños felices". Además de las actividades que organice cada familia de forma individual, la asociación pone en marcha otras actividades conjuntas.

La primera este año tendrá lugar el 21 de julio en Villalba, se realizará otra a mitad de agosto en Albarracín, y para acabar con una cena de despedida. La despedida es el momento más duro para las familias, y no lo es tanto para los niños.

Alcaire afirma que "lo mejor de este programa es que los niños vienen muy contentos, pero cuando les quedan pocos días, empiezan a tachar los días en el calendario porque vuelven con su familia. Verlos marchar felices, la primera vez te puede sorprender, puedes pensar no lo he hecho bien.

Sí lo has hecho bien, pero todos queremos volver con nuestra gente. Como les ves que se marchan contentos su partida se hace menos dura". A las familias que pudieran estar interesadas en formar parte de esta iniciativa el año que viene, Pilar Alcaire recomienda que esté "muy claro para toda la familia".

Las alegrías son muchas, pero hasta que uno no lo vive no se da cuenta de lo que supone", además, insiste en que "es muy gratificante, son muy alegres y muy cariñosos".

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