La oferta festiva de este año viene, además, mejorada y con más espacio para disfrutar en las calles. A la ampliación del recinto de El Arenal, gracias a que las txosnas volverán a su espacio original, se le añade el incremento de la superficie de dos de los espacios de conciertos. La música pop rock de grupos locales se traslada de BilboRock a la calle Bailén y el escenario de Abandoibarra, para conciertos de primera línea, se ubicará este año frente a la escalinata del museo Guggenheim.

Serán ocho escenarios, en los que cabrán todos los estilos, músicas del mundo (plaza Nueva), pop rock nacional e internacional (Botica Vieja), música clásica (plaza de la Encarnación) o verbenas (La pérgola de Doña Casilda).

Hay más mejoras. El Ayuntamiento aumentará el número de urinarios, tanto mixtos como de caballeros, en las calles. Habrá 389 en total, 63 más que el año pasado. Bilbao Turismo, por su parte, pondrá en funcionamiento cuatro puntos de información sobre la ciudad.

Un ‘txupin’ más limpio que nunca

Acabar con la moda «importada» de tirar huevos y harina durante el txupinazo. Es el objetivo de la Comisión de Fiestas, que rechaza «de forma rotunda» esta costumbre. Por ello, ha impulsado un concurso por el que premiará la mejor iniciativa colectiva –de cuadrillas, comparsas, grupos– en favor de un txupin limpio. Muchos ciudadanos rehusan acercarse a ver el pregón y el txupinazo por miedo a ponerse hechos un cisco.

Las txosnas volverán a su espacio de toda la vida

Después de tres fiestas con El Arenal en obras, las txosnas podrán volver a su ubicación original. Con la construcción de un parking también se han canalizado las redes de agua y luz. Así, las txosnas podrán tomar el suministro sin necesidad de cables y tubos, con lo que aumenta la seguridad y la comodidad. Además, por supuesto, no habrá tanta aglomeración.

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