El Ajuntament de Barcelona ha avanzado al 27 de noviembre el encendido de las luces de Navidad tras las demandas de los comerciantes, que de esta manera podrán aprovechar el alumbrado para el 'Black Friday', una jornada con descuentos que se quiere instalar en el calendario comercial de la ciudad, para después enlazar con el último fin de semana de noviembre.

Las luces estarán encendidas hasta el 6 de enero, entre les seis de la tarde y la madrugada en jornadas festivas. La intención inicial del Ajuntament era que el encendido de luces fuese el 1 de diciembre e ir atrasándolo cada año con el objetivo de reducir el consumo energético.

La apuesta del nuevo gobierno municipal durante las fiestas de Navidad es la combinación de los elementos de iluminación con actividades de dinamización en la calle que promuevan la vinculación con el comercio y otras entidades de barrio "para generar un vínculo entre ciudadanía y comercio que se extienda más allá del periodo navideño", según el Ajuntament de Barcelona.

Este año ya se han comenzado a incorporar nuevas acciones a la campaña de Navidad, como la asignación de 160.000 euros a los 1o distritos para potenciar estas actividades que vinculen comercio y ciudadanía, a parte de la tradicional iluminación de las calles, que está dotada con 850.000 euros articulados a través de subvenciones para la iluminación navideña para los comerciantes.

Esta próxima Navidad se podrá ver en la plaça de Catalunya uno de los escenarios principales de este cambio de modelo, donde esta año se ubicará una muestra de comercio responsable, actividades para todos los públicos y otros elementos de atractivo comercial, y ya no se montará la pista de hielo.

En 2016 se comenzará a trabajar conjuntamente con el sector comercial para reducir los gastos asociados a la iluminación y a la reducción del consumo energético asociado, al mimso tiempo que para trabajar las propuestas de actividades para la campaña del año que viene.