Absueltos de todos los cargos los nueve ganaderos denunciados por la Fenil por el encierro en su sede en 2008

El Juzgado de lo Penal número 9 de Madrid ha dictado sentencia absolviendo de todos los cargos que se imputaban a los nueve ganaderos y representantes agrarios por el encierro de 24 horas que protagonizaron el 3 de septiembre de 2008 en la sede de la Federación de Industrias Lácteas (Fenil), en la capital madrileña, al fracasar las negociaciones sobre el precio de la leche y otros compromisos que se exigían, como la recogida de la totalidad de la producción.

El Juzgado de lo Penal número 9 de Madrid ha dictado sentencia absolviendo de todos los cargos que se imputaban a los nueve ganaderos y representantes agrarios por el encierro de 24 horas que protagonizaron el 3 de septiembre de 2008 en la sede de la Federación de Industrias Lácteas (Fenil), en la capital madrileña, al fracasar las negociaciones sobre el precio de la leche y otros compromisos que se exigían, como la recogida de la totalidad de la producción.

Los ahora absueltos, entre ellos el secretario de Asaja en Castilla y León, José Antonio Turrado, compartieron banquillo los pasados días 28 y 30 de septiembre tras haber sido denunciados por la Fenil y el director general de dicha asociación, Luis Calabozo, si bien el proceso se ha saldado con sentencia absolutoria, aunque aún cabe recurso contra la misma.

Asaja, a través de un comunicado recogido por Europa Press, confía en que la Fenil no recurra el fallo en apelación "dada la contundencia de los argumentos de la juez".

Durante el juicio, la acusación particular calificó los hechos como un delito de allanamiento de morada y solicitó tres años de prisión e inhabilitación especial para el ejercicio de sufragio pasivo durante dicho periodo, así como otros seis meses de prisión por delito de coacciones, seis días de localización permanente por falta de daños y el pago de 80,87 euros como responsables de los daños causados.

La sentencia, se felicita Asaja, viene a ratificar la "sinrazón" de la Fenil para judicializar un conflicto que, en su opinión, siempre debió de enmarcarse en las relaciones entre una patronal de industrias lácteas y los legítimos representantes de los ganaderos con cargos en las organizaciones agrarias y cooperativas de Castilla y León.

Asaja asegura haber recibido con máximo agrado esta sentencia que "devuelve el buen nombre y proceder a las organizaciones y personas involucradas en este conflicto, y espera que se pueda retomar una senda de diálogo y negociación entre las partes para dar solución a los problemas actuales del sector lácteo, que son los mismos que los de hace siete años cuando surgió este conflicto".

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