El Juzgado de Primera Instancia número 4 de A Coruña ha emplazado al Ayuntamiento a no entregar el billete de la Primitiva premiado con 4,7 millones de euros hasta que no resuelva las reclamaciones judiciales pendientes.

El plazo de dos años para reclamar el billete premiado ha terminado este viernes con casi trescientas reclamaciones, pero ninguna de ellas aporta suficientes datos como para asegurar su veracidad, por lo que será un juez el que decida su futuro.

En junio de 2013 una administración de Loterías situada en un centro comercial de la ciudad, en la avenida de Alfonso Molina, la número 44, selló de manera automática el boleto ganador.

El propietario de la administración número veintidós, situada en la otra punta de la ciudad, en la céntrica plaza de San Agustín, Manuel Reija, asegura que lo encontró en su establecimiento encima del mostrador y, antes de tirarlo, comprobó si estaba premiado.

Reija, que es hermano del delegado de Loterías en A Coruña, explicó entonces que se había llevado una gran sorpresa al comprobar que el resguardo había sido agraciado con 4,7 millones de euros.

Él asegura que lo depositó de manera inmediata para que el Ayuntamiento se ocupase de buscar al legítimo dueño, como marca la legislación, y entonces empezaron las pesquisas municipales, que han terminado este viernes sin éxito.

Según parece, el boleto tiene unas marcas inconfundibles que su propietario debería ser capaz de describir, aunque en realidad ninguna de las casi trescientas personas que dicen ser sus dueños ha sido capaz de identificar.

El concejal de Empleo y Economía Social del Ayuntamiento de A Coruña, Alberto Lema, aclaró que el boleto está desde que se halló en posesión de la Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado (SELAE).

Lo habitual es que pase a ser propiedad del lotero que lo encontró, aunque en este caso hay varios procesos abiertos y un juez ha pedido al Consistorio que no entregue el boleto hasta que exista una resolución.

Los que han acudido a la Justicia esperan que la policía científica busque huellas u otros restos para identificar a su legítimo propietario, que se llevaría 4,7 millones de euros libres de impuestos porque el premio es anterior a la reforma tributaria.

El lotero asegura que está "desbordado" por las numerosas peticiones y ha pasado toda la jornada rodeado de cámaras de televisión que esperaban unas declaraciones de este posible futuro millonario.