La Universidad de Valladolid (UVA) ha incorporado a su flota de vehículos una furgoneta y cuatro bicicletas eléctricas con las que inicia su progresiva renovación para abandonar los motores de combustión y sustituirlos por eléctricos.

Así lo ha anunciado este martes el rector de la UVA, Daniel Miguel, quien ha subrayado que la nueva furgoneta, una Renault Kangoo, es el primer vehículo eléctrico que se une a la flota de la Universidad, al que espera sumar un segundo a finales de año.

Esta primera furgoneta se empleará para el reparto del correo del Alma Máter entre sus distintas instalaciones, mientras que los siguientes en llegar prestarán servicio a otros trabajadores de la Institución académica como los encargados de Mantenimiento.

Miguel ha destacado las ventajas de los vehículos eléctricos, entre las que ha citado la ausencia de emisiones a la atmósfera o de ruido, a la vez que "supone un ejemplo para que el ciudadano se anime a cambiar sus patrones de desplazamiento".

En ello ha coincidido el responsable de Vehículo Eléctrico de Renault, Luis Velerio, el cual ha insistido en que la movilidad eléctrica "se basa en la comunicación y en los ejemplos". En declaraciones recogidas por Europa Press, Valerio ha subrayado que este sector "no es una apuesta de futuro, sino de presente" para la multinacional del rombo.

Al acto ha acudido también el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, quien ha agradecido la colaboración de la Universidad a la hora de promover la movilidad sostenible, la cual ha prestado durante esta jornada de Día sin Coche los aparcamientos de sus campus como estacionamientos disuasorios. Al mismo tiempo ha ensalzado la apuesta de Renault por el coche eléctrico, una compañía que ha vinculado a Valladolid. "Es nuestra marca, nuestro coche", ha subrayado.

Menos coste y emisiones

Se estima que el coste de recarga del vehículo eléctrico se sitúa en 1,5 euros por cada 100 kilómetros, frente a los seis o siete euros en los de gasolina. Con la adquisición de la nueva Kangoo eléctrica, la UVA espera reducir un 82 por ciento sus emisiones de CO2, al pasar de 237 gramos por kilómetro a 41,4.

Actualmente la Universidad cuenta con un poste de recarga situado en el aparcamiento de la Escuela de Ingenierías Industriales al que se sumarán otros tres en el Colegio Mayor Santa Cruz Femenino, en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura y el Campus de la Yutera en Palencia. El objetivo es extender este servicio posteriormente a los campus de Segovia y Soria.

La Universidad de Valladolid cuenta actualmente con nueve vehículos a motor que consumen cerca de 7.300 de gasoil al año y unas 200 bicicletas, a las que se han sumado cuatro eléctricas —una de ellas plegables— que serán utilizadas para la movilidad del personal universitario, con lo que se busca evitar que tengan que recurrir al uso del coche. A éstas la UVA espera sumar otras nuevas a finales de año.

Precisamente, Óscar Puente ha anunciado que antes de que concluya este 2015 los usuarios de Auvasa podrán subir sus bicicletas plegables de forma gratuita en los autobuses municipales.

Se estima que la comunidad universitaria de la UVA registra una media diaria de más de 51.000 viajes sólo en el Campus de Valladolid —sin contar los de Palencia, Segovia y Soria—, el 40 por ciento de ellos realizados en automóvil particular. Además, el 27 por ciento de los alumnos y un 55 por ciento de los empleados universitarios acuden a estudiar y trabajar en coche.

Para potenciar el uso de transportes alternativos y menos contaminantes, la Institución académica concurre a un proyecto como Univer-City que incorpora un sistema de préstamo de bicicletas 4.0 para toda la comunidad universitaria que incluye un dispositivo de geoposicionamiento a bordo con funcionalidades antirrobo y que podrán localizarse y desbloquearse a través de una aplicación en dispositivos móviles.

Asimismo, se fomentará un sistema de viaje compartido para usuarios de la Universidad.