Coincidiendo con la vuelta de vacaciones, el comienzo del curso escolar y el aumento de desplazamientos de menores en vehículos particulares para acudir o regresar del colegio, la Dirección General de Tráfico ha llevado a cabo una campaña de sensibilización y control del uso del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil en la provincia de Sevilla, en el marco de la cual se han detectado a más de 150 personas viajando sin cinturón.

Durante la semana del 7 al 13 de septiembre, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han incrementado los controles, llegando a vigilar a casi 13.700 vehículos y comprobando que tanto conductor como pasajeros llevaban correctamente abrochado el cinturón de seguridad y que los menores viajaban con el sistema de retención infantil adecuado a su peso y talla, según ha informado la Delegación del Gobierno en un comunicado.

Pese a los mensajes difundidos por diferentes organismos y el conocimiento general que se tiene de que su uso reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de accidente, más de 150 personas circulaban en vehículos sin hacer uso del mismo.

Concretamente, en siete días, los agentes de tráfico han comprobado que 146 adultos y 12 menores de 12 años viajaban sin ningún tipo de sistema de retención. De los 146 adultos, 92 eran conductores y 54 pasajeros (38 viajaban en los asientos delanteros y 16 en los traseros).

En el caso de los menores, de los 12 que no llevaban cinturón de seguridad ni sistema de retención infantil, tres viajaban en los asientos delanteros y nueve en los asientos traseros.

Como se observa en los resultados de los menores, el uso del cinturón y de los SRI en los asientos traseros es tres veces inferior al que se produce en los asientos delanteros. En un impacto frontal, la probabilidad de que un ocupante de los asientos traseros, sin cinturón de seguridad golpee mortalmente a otro pasajero de los asientos delanteros, puede ser de hasta ocho veces mayor.

Respecto a la prioridad de la vigilancia en las carreteras convencionales, el 63 por ciento de las personas que no hacían uso de dicho dispositivo de seguridad circulaban por este tipo de vías, que son las que registran siete de cada diez víctimas mortales.

A estos resultados hay que sumar los controles que las distintas policías autonómicas y locales han realizado en su ámbito de competencia, una colaboración que es muy importante, de modo que se unifica el mensaje de que el uso del cinturón de seguridad es obligatorio independientemente de la vía por la que se circule.